Remontada de orgullo y golpe encima de la mesa del campeón

Remontada de campeón, y sin Messi

German Bona

German Bona

Los grandes campeones se miden por su capacidad de reacción, por saber levantarse por muchos golpes que reciba. Y este Barça demostró que tiene madera, que para tumbarlo no es suficiente con caer en la primera jornada, perder al mejor futbolista del mundo y a su 'pistolero' o encajar un gol prácticamente en frío. La goleada ante el Betis es fruto del orgullo de unos jugadores que estaban escuchando demasiado ruido a su alrededor. Dieron un golpe encima de la mesa para que ya nunca más se dude de ellos.

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LaLiga Santander

5
2
Alineaciones
Barça
Ter Stegen; Semedo, Piqué, Lenglet, Jordi Alba; Busquets (Arturo Vidal, 72'), Sergi Roberto, De Jong; Carles Pérez (Ansu Fati, 77'), Griezmann y Rafinha (Junior Firpo, 80').
Betis
Dani Martín; Emerson, Bartra, Sidnei, Pedraza; William, Guardado (Joaquín, 60'), Canales (Lainez, 74'); Fekir, Loren y Tello (Kaptoum, 60').

Y es que no se puede decir que la puesta en escena del Barça fuera, ni mucho menos, deficiente. De hecho, los azulgranas salieron en tromba y muy activados, con la necesidad de recordarle a su rival que al Camp Nou se viene a sufrir.

Alineó Valverde un once esperado, quizás con la única sorpresa de una nueva suplencia de Rakitic. Con Busquets regresado a la sala de máquinas, De Jong se situó a la izquierda y Sergi Roberto lo hizo por la derecha. Arriba, la gran novedad del chaval del filial Carles Pérez y Griezmann ubicado como '9'.

Jarro de agua fría

Precisamente, del francés fueron las primeras ocasiones, un chut lejano y la culminación de una interesante combinación ofensiva. Así que el gol del Betis cayó como un auténtico jarro de agua fría. La pérdida en el pase horizontal de Busquets a Rafinha le valió a Canales para armar un rápido contragolpe. Precisa y certera la asistencia de Loren entre los centrales azulgranas y chut muy bien ejecutado de Fekir ante la desesperada salida de Ter Stegen. El de Lyon, una de las bombas del mercado, si algo tiene es calidad.

El mazazo fue grande, pero el Barça siguió insistiendo. Le faltó la chispa con la que había arrancado y por momentos, todo costó un poco más. La buena actitud, en el césped y también en la grada, permitieron al equipo digerir el golpe y recuperar las fuerzas..

Griezmann imparte justicia

Notoria fue la reacción antes del descanso. Gran ocasión de Rafinha, penalti no concedido por manos de Canales y el balsámico gol de Griezmann. El francés interpretó el papel de 'killer' en un gol que podía haber firmado Luis Suárez. Se lanzó con todo al pase con veneno de Sergi Roberto y marcó con la tibia izquierda. Un gol más que celebrado y con la sonrisa de complicidad de Messi y Luisito desde sus asientos. El empate hizo justicia y hasta se quedó corto. 

Solo el tiempo que duró el descanso. Porque Griezmann siguió con su plan ejecutor, y a la primera que tuvo, le dio la vuelta al partido. De nuevo apareció Sergi Roberto para ofrecerle el balón, el francés lo acarició con su zurda y se inventó una rosca prodigiosa. Sidnei y Dani Martín apenas pudieron ver la trayectoria del balón.

Carles Pérez y Alba se suman a la fiesta

Griezmann ya es un futbolista consolidado. Pero ojo a lo que viene por detrás. Carles Pérez tiene algo que no siempre es fácil de encontrar en un canterano. Le van los retos y nada le intimida. Además de ser un grandísimo futbolista. El de Granollers puso el tercero con un gol de crack, finta con el cuerpo y chut seco y duro. La valentía que tiene sobre el césped la debe tener ahora Valverde con el futbolista, y no solo cuando no haya más remedio por las ausencias.

Se sumó también a la fiesta Jordi Alba en un Barça arrollador y gustándose. El de L'Hospitalet marcó tras una gran recuperación y pase de Busquets. Un lateral con alma de delantero.

Rúbrica de Arturo y golazo bético

El fin de fiesta fue espectacular. Arturo Vidal fusiló a la red cuando solo llevaba tres minutos en el campo, debutó el juvenil Ansu Fati para llevarse una atronadora ovación y rozar un gol que hubiera puesto patas arriba el Camp Nou, y Loren marcó en la otra área un golazo de antología. La noche empezó rara, preocupante, y acabó a lo grande. El campeón es mucho campeón.