Rafinha en el Leganés-Barça: no fue ningún experimento

La alineación de Luis Enrique en el estadio de Butarque frente al Leganés fue una gran sorpresa. Nadie esperaba una defensa de tres y, mucho menos que Rafinha ejerciera de carrilero por la derecha.

Las dudas de los aficionados en los minutos previos al inicio del choque estaban justificadas, pero la decisión de Luis Enrique no fue un capricho. Tenía motivos para creer que Rafa funcionaría en esta posición.

Aunque es una demarcación en la que no ha jugado con el Barça, no era su debut en una demarcación similar en la élite. Luis Enrique lo escoró a menudo en la banda derecha en su etapa como entrenador del Celta.

VIEJOS AUTOMATISMOS

No ejercía de lateral porque el Celta jugaba con línea de cuatro atrás, pero sí que se situaba en el centro del campo muy pegado al costado, con largo recorrido. Rafinha, por tanto, recordó viejos automatismos en Butarque.

En esta posición se lució especialmente en un partido de Liga en el Santiago Bernabéu. El día de Reyes del 2014, el Celta visitó el feudo blanco y Luis Enrique colocó a Rafinha en la banda derecha.

Debía ayudar a Hugo Mallo, el lateral diestro, y desplegarse en ataque como extremo. Augusto, Oubiña y Álex López formaron un centro del campo férreo, con Rafinha y Orellana rompiendo por las bandas, dejando a Charles de ariete.

Rafa fue el mejor jugador del Celta. Hizo movimientos muy parecidos a los de Butarque. Controlando el balón de espaldas, pegado a la línea, oxigenó el juego celtiña y realizó arrancadas muy poderosas a pierna cambiada.

La pegada del Real Madrid en los últimos minutos fue determinante para la victoria por 3-0 con los goles de Benzema y Cristiano Ronaldo (2).

EXPERIMENTO TESTADO

Éste partido, y otros que jugó de forma parecida, estaban en la mente de Luis Enrique, por lo que situar a Rafinha de carrilero era un experimiento más que testado.

La fórmula podría repetirse en próximos partidos, sobre todo, cuando el técnico considere que Sergi Roberto tenga que descansar, el único lateral derecho de la plantilla que parece gozar de su confianza.

Aleix Vidal se ha quedado fuera de la lista en los dos últimos partidos y parece contar con mínimas opciones de volver a ser un futbolista que entre en los planes del asturiano.

La variante de los tres centrales permite incorporar a un cuarto centrocampista y así aprovechar jugadores que se quedan sin hueco con el clásico 4-3-3. Esta situación no solo beneficia a Rafinha, sino que podría dar minutos a Denis Suárez o André Gomes.