Así se prepara Ángelo para triunfar en el Santos y dar el salto a Europa

Ángelo solo tiene 17 años, ya ha completado 50 partidos en el Santos, donde es titular indiscutible y tiene la responsabilidad de marcar las diferencias. El Barça ya ha adquirido un precio de compra cerrado de 35 millones de euros. Nada es fruto de la casualidad. A su incuestionable talento precoz, sus recursos técnicos exquisitos, con una zurda que es orfebrería, hay que unirle una mentalidad ganadora y un entorno familiar y profesional que lo aúpan. En esta entrevista exclusiva concedida a SPORT en su casa, el extremo habla de cómo concibe su trabajo en el 'Peixe', en su primera etapa en el fútbol profesional. Europa le espera.

En Santos dicen que usted debe marcar las diferencias…

Cuando te pones la camiseta del Santos, tienes una gran responsabilidad. Juego con futbolistas de mucha experiencia y calidad. Me concentro mucho en el partido y solo pienso en divertirme jugando, pero si están diciendo esto creo que es bueno, es un privilegio saber que tengo que jugar bien y darlo todo por mi equipo.

¿Se siente como el último exponente de ‘Menino da Vila’: delgado, driblador…?

No, no. Todo el mundo sabe que la base del Santos es impresionante. El agua de la Vila Belmiro es diferente. Solo soy uno más entre miles de chicos que van a surgir. Es un privilegio, para mí, ser uno de ellos y ser comparado con otros que surgieron aquí. Puede estar seguro, de aquí saldrán muchos otros chicos buenos.

Su juego se basa en el uno contra, ¿no siente la presión siendo tan joven?

Yo juego leve, soy un delantero que intento marcar goles y decidir los encuentros. No siento la responsabilidad ni la presión de decidir o cambiar un partido o llevar a mi equipo hacia la victoria. Pienso muy colectivamente.

¿Por qué en el Santos siempre salen tantos canteranos?

Los profesionales que hay en el club dejan a los jóvenes a gusto para que nos centremos solo en jugar a fútbol, en divertirnos para que el Santos esté arriba de todo.

Ya alcanzó los 50 partidos en el primer equipo…

Insisto, lo veo como un privilegio, como un honor. Jugar en el Santos es un motivo de mucha alegría para mí. Admiro este club desde pequeñito. Y siempre soñé en vivir esto: jugar en la Vila Belmiro, completar 50, 100 partidos… Es un motivo de alegría no solo para mí sino para toda mi familia.

¿Cuáles son sus propios pasos profesionales?

Consolidarme en el Santos. Pienso solo en jugar a fútbol, en ser feliz aquí, en marcar goles y divertirme. Quien sabe ganamos el Paulista ahora, el Brasileiro, la Copa do Brasil o la Copa Sudamericana que disputamos esta temporada. Claro que sueño en jugar la Champions, la Premier, LaLiga, la Copa del Mundo, pero en un futuro a medio plazo.

UNA PREPARACIÓN INTEGRAL

¿Trabaja con un personal trainer?

 Sí. Todo se habla con el club, con los preparadores físicos, con el entrenador, con mi representante y conmigo. El objetivo es entrar en campo y que dé mi mejor, que todo salga bien. El trabajo se realiza con cautela, para que no sea una carga excesiva.

¿Uno de sus objetivos a medio plazo es ganar masa muscular? ¿Qué le dicen los profesionales?

Aún estoy en fase de crecimiento. La preparación es a corto y a medio plazo pensando en que pueda aguantar la complejidad que supone jugar en el fútbol profesional. Tengo que mejorar en muchas cosas, no solo en la parte física sino en la parte táctica y técnica. Aún soy un chico, pero un chico que busca la perfección en todo momento y que siempre quiere ser el mejor.

¿Psicológicamente trabaja de alguna forma?

Sí. Siempre hay que tener un psicólogo. A veces, es más para distraerte, para poder andar por la calle, ir a la playa, salir con mis hermanos. Tengo un psicólogo que me ayuda a relajarme, a pensar en mi vida, en mi familia, en mis hermanos. Todo esto se habla con el Santos buscando el mejor rendimiento.

Y tiene un equipo profesional que le asesora.

Sí, hay un equipo de gestión de carrera. Mi representante, Marisa, tiene una gran empresa que me ayuda mucho dentro y fuera del campo.

El presidente del Santos, Andrés Rueda, en una entrevista a SPORT, elogió mucho a su familia…

Mi familia es la base, lo es todo para mí. Son personas maravillosas. Todo lo que estoy conquistando y todo lo que tengo se lo debo a ellos, por todo el apoyo y la motivación que me dan. Juego por ellos y también por mí. Si no fuese por mi abuela sería muy difícil estar viviendo este sueño… también por mis hermanos, a quien los amo mucho. Hay mi padre, mi madre, mis tíos, mis primos... Gracias a Dios tengo mi familia cerca de mí, me apoyan y me dejan bien tranquilo y feliz para jugar.

¿Hay alguien que necesita bajarlo de la nube o nunca se dejó deslumbrar?

Nunca fui una persona que me quede alucinado con las cosas que deseé y soñé. Está claro que cuando todo viene muy rápido, te alegras un montón. A veces, mi hermano mayor me da un tirón de orejas y me dice ‘tranquilo, no vayas por aquí sino por ahí’, mi padre también. Mi agente, Marisa, habla conmigo todos los días para mantenerme con los pies en el suelo, porque esto es solo el inicio. Soy una persona tranquila.

Y hay su abuela...

Mi abuela también da tirones de oreja, me dice ‘agradece a Dios por esto y por todo lo que sucede en tu vida’. Somos religiosos. Creo en Dios. Y mi familia me baja del pedestal para que yo solo juegue a fútbol.