Así es el método Xavi para fichar a jugadores en el Barcelona

El técnico intenta recabar el máximo de información posible antes de contratar a jugadores

Hay informaciones técnicas, tácticas y físicas y otras más personales

Xavi Hernández: "Nuestro ADN es ganar jugando bien"

Xavi Hernández, en la rueda de prensa previa al partido ante el Granada / Twitter

Albert Masnou

Albert Masnou

El caso aparecido en las últimas horas sobre 'el veto' de Busquets al fichaje de Arthur y el de Dembléle al de Pavard ha abierto un debate sobre el porqué jugadores del Barcelona puedan llegar a influir en decisiones de la secretaría técnica. La razón a esta influencia es la política de Xavi Hernández en la incorporación de jugadores.  No es que Dembélé y Busquets vetaran a estos jugadores, según informaciones de Catalunya Radio, sino que sus informes no fueron positivos.

Antes de decidir si ficha o no a un jugador, el técnico quiere recopilar el máximo de información de este futurible. Xavi quiere saberlo todo de estas opciones que le ofrece el mercado, tanto de su comportamiento dentro como fuera de los terrenos de juego. Es un método complejo y lleno de pasos para certificar que la inversión vale la pena. 

Xavi, con su staff

Xavi, con su staff / AFP

Para analizar la idoneidad de un fichaje, Xavi somete al jugador a un verdadero examen. Son sus ayudantes en el staff y el propio Xavi mismo quienes primeros analizan sus capacidades técnicas, físicas y tácticas, algo que se puede apreciar viendo videos, partidos en directo con un seguimiento continuado o datos que ofrecen las diferentes plataformas que las entidades deportivas tienen contratada. Es una información que no se precisa hablar con nadie, pues el ojo del entrenador o de sus ayudantes puede llegar a ser suficiente para una primera criba. 

Segunda prueba

Si supera este test, le toca el turno a la secretaría técnica que analizará si es un fichaje posible, si puede hacerse esta inversión y cuál es el salario y qué oferta se le puede presentar. Detalles como su edad, su salario y su coste son claves en este sentido. 

Al mismo tiempo, Xavi y los suyos intentan recabar el máximo de información posible sobre el jugador, sobre su vida privada, sobre su actitud ante el deporte, sobre su nivel de profesionalismo, sobre su comportamiento dentro del vestuario, como es cuándo juega y cuándo es reserva, sobre su capacidad de incorporar nuevos conocimientos tácticos, sobre su pasado y su adaptación a diferentes estilos de juego... Todo para evitar que lleguen las sorpresas una vez se haga efectiva su incorporación. 

Joao Félix, Cancelo y Ferran, en una imagen de archivo

Joao Félix, Cancelo y Ferran, en una imagen de archivo / FCB

Tercera prueba

El siguiente paso, si es preciso, es que el propio Xavi Hernández hable con el propio interesado (Pablo Torre reconoció que el técnico le llamó en su día) ya sea por teléfono o de forma presencial, tal y como ocurrió, por ejemplo, con Haaland en un viaje relámpago que hicieron Xavi y Jordi Cruyff, entonces secretario técnico. 

Si durante todo este proceso, Xavi recibe inputs negativos (como pudo haber pasado con Arthur y con Pavard), el fichaje queda en un segundo término o incluso es descartado en su totalidad para buscar nuevas opciones que ofrece el mercado. Por los muchos años que lleva en el mundo del fútbol, Xavi tiene contactos suficientes para recabar el máximo de información posible con fuentes que conocen de primera mano al afectado, al jugador que el Barcelona piensa fichar. 

Es un proceso que se acostumbra a trabajar desde enero hasta verano teniendo en cuenta las necesidades del equipo. En este sentido, la máxima de Cruyff está presente en el día a día del entrenador: Decidir cuanto antes para que las negociaciones sean más fáciles y más baratas.