Historia SPORT

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El 'malabarista' Depay ya piensa en el Barça tras un tremendo disgusto

El atacante azulgrana cuajó una gran primera mitad, pero se fue diluyendo (como su selección) y queda eliminado en una de las sorpresas del torneo

Demostró su capacidad de jugar de espaldas y su rol camaleónico cayendo a banda y bajando a recibir

Depay, un atacante total para el Barça

Depay, un atacante total para el Barça / Perform

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Se acabó el cuento de la Eurocopa para los Países Bajos y para Memphis Depay. De forma totalmente inesperada, una de las selecciones que mejor juego había desplegado en la fase de grupos se despide ante un combinado teóricamente muy inferior como la República Checa. La 'Orange' fue una sombra de su puesta en escena en los tres partidos anteriores, pero sobre todo se vio perjudicada por la tempranera expulsión de Matthijs De Ligt en una acción desafortunada.

De esta forma, el flamante fichaje azulgrana ya piensa única y exclusivamente en su futuro en el FC Barcelona (bueno, en eso y en unas merecidas vacaciones). No ha cuajado su mejor partido en la Eurocopa el ex del Lyon, pero sí ha dejado pinceladas de su clase, sobre todo a lo largo de la primera mitad. Sin encontrarse nunca con su juego ni con la fluidez mostrada hasta hoy, los Países Bajos han cargado el ataque hacia el costado derecho, donde Dumfries ha sido un incordio en los primeros 45 minutos.

CLÍNIC DE ESPALDAS

Depay ha caído bastante a esa banda y se ha asociado bien con el jugador del PSV. Además, ha dado un 'clínic' jugando de espaldas y habilitando a sus compañeros. Es sin duda uno de los puntos fuertes del neerlandés, que además tiene un trato de balón exquisito y siempre saca petróleo de acciones aisladas. De hecho, en el primer tiempo ha realizado una jugada más propia de fútbol sala para habilitar a Van Aanholt dentro del área.

A partir del descanso el delantero ha dado un bajón, pero aún así, con un toque de espuela exquisito, ha habilitado a un Malen que ha tenido en sus botas un 1-0 que podría haber cambiado el signo de todo. Decepción mayúscula, pero visto desde el prisma barcelonista es un alivio que Memphis pueda descansar ya antes de empezar su aventura en el Camp Nou.