Liderato y presión

Setién, optimista con la lucha por LaLiga frente al Real Madrid

 El técnico blaugrana señaló la poca diferencia en la tabla con el máximo rival / Laia Cervelló

Dídac Peyret

Dídac Peyret

Toca levantarse tras la decepción del clásico. Lo anunció ayer Setién en una rueda de prensa marcada por la figura de Eder Sarabia. No tiene una hora tranquila el técnico, que suma solo 53 días en el cargo pero ya ha visto de todo. 

En una semana en la que se ha puesto en duda su relación con la plantilla, su segundo ha terminado en el punto de mira por comportarse con naturalidad en el banquillo del Bernabéu. 

Sus aspavientos y quejas airadas a algunos futbolistas han acabado con una disculpa de Sarabia y un toque público de Setién, que le ha instado a “cuidar las formas”. Otro episodio más en la tensión permanente en la que anda instalado el club. El técnico insiste en la buena disposición de los jugadores, pero también reconoce que siente en sus carnes su escrutinio. 

“Uno se tiene que ganar la confianza. Estos futbolistas llevan ganándolo todo durante años, con ese currículo tan extenso, y cuando llega uno nuevo miran a ver qué puede aportar esa persona. A algunos les convences más rápido y a otros, no tanto. Pero ese es mi trabajo, ganarme su confianza”. 

Un proceso para el que necesita resultados para poder seguir incorporando sus ideas al equipo. Y para recuperar el liderato que el equipo se dejó en el Bernabéu. Un partido de sensaciones encontradas, de dinámicas opuestas, en el que el Madrid tuvo más acierto y suerte (“nos faltaron diez centímetros”, se justificó Setién). Y que el técnico  subrayó ayer que no ha dejado secuelas.

La primera oportunidad para recomponerse será hoy (18.30 horas/Movistar LaLiga) ante la Real Sociedad en el Camp Nou. 

Un encuentro exigente, frente uno de los equipos que despliega un fútbol más atractivo de la competición, y al que Messi, con este entrenador, Imanol Alguacil, no ha sido capaz de marcarle. 

Momento Braithwaite

Una de las grandes dudas es si habrá un planteamiento más ofensivo de Setién tras las buenas sensaciones que ha dejado Braithwaite en sus dos apariciones. La entrada del danés supondría un regreso al 4-3-3 más clásico.

Una opción a la que renunció en el Clásico. Y que matizó en Nápoles, donde Arturo Vidal, un centrocampista, hizo funciones de extremo. El danés ha dejado claro esta semana que su intención no es pasar de puntillas por el Barça. Y que ha llegado para quedarse.  

Escuchándole si algo no le falta al ex del Leganés es confianza. Y además parece haber entrado bien a la afición del Barça, uno de esos fenómenos que ocurren de vez en cuando y donde también intervienen los intangibles. En el caso de Braithwaite, su juego esforzado y la falta de vedetismo de un jugador que se estrena en un grande. 

El que seguro no estará es Arthur, que se pierde el encuentro por una lesión en el tobillo. De nuevo otro contratiempo en el peor momento. Otra vez Arthur, que se está convirtiendo en un habitual de la enfermería. Justo ahora que parecía haber encontrado su ritmo de juego. Justo ahora que Setién parecía dispuesto a apostar por él, se cae del equipo. 

Pendientes del Madrid

El Barça buscará  hoy los tres puntos para irse a dormir líder. Si lo logra obligará al Madrid a tener que ganar su partido ante el Betis mañana (21.00 h/Movistar LaLiga). El conjunto blanco juega en el Villamarín, ante un rival de contrastes, que necesita los puntos para apartar el fantasma del descenso. 

Si el conjunto de Setién gana hoy la presión cogerá el puente aéreo en una Liga sin un pronóstico claro a falta de 12 jornadas. El Barça necesita recomponerse hoy con una victoria.