Las cláusulas 'centenarias', escollo de algunas renovaciones de canteranos

El Barça ha iniciado una fuerte apuesta para blindar a sus canteranos más prometedores y evitar la fuga de talentos. De momento, del juvenil campeón de Europa ya han renovado tres futbolistas: el meta Iñaki Peña, el central Chumi y el centrocampista Riqui Puig. A los dos últimos se les ha impuesto oficialmente una cláusula de rescisión de cien millones de euros, una cifra astronómica y que en otros casos pendientes crea recelo.

Y es pasar de una cláusula de rescisión de tres millones a una de cien es un cambio grande. Evidentemente, viene acompañado de un proyecto deportivo ambicioso -los futbolistas están firmando por tres temporadas y dos opcionales con vistas claramente al primer equipo- y de una notable mejora salarial, aunque desproporcionada con este blindaje más propio de estrellas consolidadas que de jóvenes promesas,

Aun así, las renovaciones van a seguir llegando, pues la idea es garantizar la continuidad del once titular del juvenil que se impuso al Chelsea en Nyon en la final de la UEFA Youth League. A ellos también hay que sumar a Oriol Busquets, que termina contrato y sería en estos momentos el caso más urgente, pues queda poco más de dos semanas para el 30 de junio.

Su renovación está algo estancada, como la de Miranda, mientras que con Abel Ruiz también falta algún escollo a solucionar para que sea, como se espera, el próximo en firmar.