Laporta y Xavi 'presionan' a Jordi Cruyff

Tal y como informó SPORT un día después de que Mateu Alemany anunciara a través de un comunicado de prensa del club que deja el Barça para fichar por el Aston Villa, Jordi Cruyff es el elegido para hacerse cargo de la responsabilidad que hasta el 30 de junio ejerce el actual director del Área de Fútbol.

El problema, para el Barça, es que quien hoy es el director deportivo finaliza su contrato como ejecutivo blaugrana el próximo 30 de junio y aún no ha tomado una decisión respecto a su futuro. Y no parece que la vaya a tomar de forma acelerada, pese a que desde la entidad le están animando que así sea.

Sin Mateu Alemany, la pérdida de Cruyff obligaría a realizar una reestructuración total del Área de Fútbol y, en este momento, existe demasiado trabajo por hacer para invertir energías en otra cosa que no sea ejecutar la planificación realizada desde los despachos para cumplir con el Fair Play de LaLiga y poder acometer los refuerzos necesarios para que la calidad de la plantilla de Xavi siga creciendo.

Nada más darse a conocer la salida de Mateu Alemany, Joan Laporta tuvo muy claro que la persona idónea para relevarle era Jordi Cruyff. Y así se lo trasladó de forma personal al director deportivo, cuya trayectoria en el Barça, pero también en los despachos del AEK Larnaca y del Maccabi de Tel Aviv, le avalan. Sin embargo, el ejecutivo necesita tiempo para tomar una decisión y se guiará, única y exclusivamente, aunque en un mundo tan profesionalizado como este pueda sonar naíf, por su intuición.

Ni la posible llegada de Deco, que pasaría a formar parte de la dirección deportiva, ni la salida de Mateu Alemany condicionan para nada el futuro de Jordi Cruyff. Tampoco las condiciones económicas van a ser una razón que pueda hacer decantar la balanza hacia un sentido u otro. Si da el sí a su renovación, lo hará guiado por sus sensaciones y la garantía de poder seguir desarrollando su trabajo en beneficio del proyecto deportivo.

Con el aval de todos

En ese sentido, precisamente, uno de sus mejores aliados en la entidad es Xavi Hernández, con quien mantiene una estrecha relación y con quien hablan el mismo idioma futbolístico. Uno de los grandes aciertos de Jordi Cruyff durante su etapa en los despachos del Barça ha sido la contratación de Andreas Christensen, que llegó avalado por él y cuyo rendimiento ha superado incluso las expectativas hasta el punto de ser considerado intransferible.

Xavi, como Joan Laporta, entiende que son decisiones muy personales, pero también ha pedido a Jordi Cruyff que valore el trabajo que aún pueden hacer juntos. Y es que el ejecutivo no solo tiene una visión panorámica de lo que necesita el primer equipo, sino que, como Mateu Alemany, ha demostrado ser un buen negociador, una faceta que ha desarrollado a lo largo de su carrera profesional, sobre todo en Israel. La pelota está sobre su tejado y quienes le rodean en el club esperan que la recupere y siga jugando. Queda mucho por hacer y todo es posible.