Gavi-Joaquín: el duelo generacional más extremo

Cuando Joaquín Sánchez jugó su primer partido con el primer equipo del Betis, un 20 de agosto de 2000 en el Trofeo Colombino, todavía quedaban casi cuatro años para que Pablo Páez Gavira, conocido futbolísticamente como Gavi, llegara a este mundo.

Este sábado, con el permiso de Manuel Pellegrini, porque el de Xavi Hernández se puede dar por hecho, se dará en el Camp Nou el duelo generacional más extremo de nuestro fútbol: el futbolista más joven con minutos en la presente edición de LaLiga contra el más veterano. Veintitrés años y quince días les separan. Aquello de que por edad, Joaquín podría ser el padre de Gavi se queda hasta corto...

El azulgrana se formó en la cantera de un Betis donde ya no estaba Joaquín en ese momento, pues tras dejar el equipo verdiblanco pasó por Valencia, Málaga y Fiorentina. Y curiosamente, cuando en 2015 el del Puerto de Santa María regresó al club de su vida, Gavi fichó por el Barça siendo alevín de segundo año tras despuntar como verdiblanco. La eclosión del de Villafranca y Los Palacios está siendo meteórica, se convirtió en el jugador más joven en disputar un Clásico como titular con 17 años y 80 días, lo hizo en el Barça-Madrid de esta temporada en el Camp Nou, o, por poner otro ejemplo, en el internacional más joven de la historia de la selección española, con 17 años y 62 días. Lo certificó en San Siro contra Italia en las semifinales de la Nations League.

Precocidad ante experiencia

Pero a buen seguro que, aunque no hayan coincidido, Joaquín es un espejo para Gavi. Como para tantos otros futbolistas que sueñan con una carrera longeva y reconocida. Y es que detrás del sentido del humor y los chistes, hay un profesional como la copa de un pino que se ha convertido en el futbolista más veterano no solo de la competición española, sino también de las cinco grandes Ligas. Y aunque esta temporada no esté jugando mucho, básicamente lo está haciendo en la Europa League, tiene muchísimo mérito.

Caminos que se cruzan

Joaquín Sánchez ha construido su larga carrera desde la banda, donde se hizo famosa aquella 'finta y sprint' que se anunciaba desde la megafonía del Benito Villamarín. Gavi no es ni mucho un extremo, su sitio natural, como recuerda con cierta ironía Luis Enrique siempre que le lleva a la selección, está en el interior, pero su inteligencia táctica y su incansable espíritu le llevaron a ocupar el carril con Xavi Hernández en el debut del técnico egarense ante el Espanyol.

Gavi regresó al centro del campo en los dos siguientes partidos, en una posición más adelantada de lo habitual junto a su compañero generacional Nico. Un 'cuadrado mágico' con Busquets y De Jong como escuderos. Mientras asciende como un cohete en sus primeros pasos de un largo camino, el de Joaquín se acerca al final, según las propias palabras del verdiblanco. Apunta a ser su último partido en el Camp Nou y si juega, bien que se merece un aplauso de reconocimiento.