El dato más sonrojante que nos deja el Leganés-Barça

No pasa por su momento más esplendoroso la zaga del Barça. Sobra con haber visto los dos últimos encuentros del cuadro azulgrana, repletos de errores individuales, para poder hacer esa afirmación. Si en la temporada pasada esa había sido la gran bandera del Barça de Valverde, la solidez defensiva, el arranque liguero 2018/2019 para nada está siguiendo ese patrón. Siete tantos en seis partidos de Liga disputados (1,16 por encuentro) representan un pobre bagaje teniendo en cuenta que para encajar esa cifra de goles el equipo barcelonés tuvo que esperar hasta la jornada 14. De hecho, los de Valverde aguantaron sin encajar un solo gol hasta la quinta fecha, cuando se impusieron en el Coliséum, pero el japonés Shibasaki pudo perforar por vez primera la portería de Ter Stegen en el campeonato liguero. 

Dos partidos para olvidar

Estos dos últimos encuentros ligueros no serán fácil de olvidar. De hecho, lo mejor sería hacer un ‘reset’ rápido para el ‘Txingurri’ y sus pupilos. Los dos tantos frente al Girona vinieron precedidos por dos errores (uno de bulto, otro más leve) de Gerard Piqué. Trayectoria prácticamente impecable del central barcelonés en el Barça, qué vamos a decir, pero será este posiblemente una de sus peores semanas desde que viste la zamarra azulgrana. Frente al Leganés ayer, de nuevo Gerard erró clamorasamente en el segundo tanto ‘pepinero’ con un rechace defectuoso que cayó a pies de Óscar. En el primero, por cierto, otro fallo individual. Vermaelen llega muy tarde a cerrar y ve cómo El Zhar, al que por cierto le saca 13 centímetros, le gana la partida por arriba para empatar.

Una de las máximas preocupaciones a partir de ya para el entrenador azulgrana debe ser encontrar de nuevo esa solidez, esa fiabilidad que parece haber perdido el equipo la última semana. “No me preocupan los goles encajados porque son fruto de errores puntuales. El único gol que hemos encajado hasta ahora que ha venido de un fallo de organización ha sido el del gol contra la Real”, aseguró en rueda de prensa Valverde aún con todo muy caliente en Butarque. No está preocupado el ‘Txingurri’. Quizás tiene razón en no estarlo, puesto que todo esto no ha hecho más que comenzar y la situación no es para nada dramática.

Tiene por delante el conjunto azulgrana dos magníficas oportunidades ahora para demostrar que solo se trata de un ‘bache’ puntual, sin importancia. El sábado en el Camp Nou contra el Athletic y el miércoles en Wembley ante el Tottenham serán dos escenarios perfectos para comenzar a revertir esa situación. El conjunto de Valverde encajó 29 goles en 38 partidos la temporada pasada (una media de 0,76 por encuentro). En seis fechas de la 2018/2019 llevamos siete (1,16 de media).