Nuevo trámite para el Barça en ASOBAL

El Recoletas Atlético Valladolid compitió este viernes, dentro de sus circunstancias y diferencia de plantel, ante un Barça que afrontó un nuevo trámite en la Liga Asobal, donde no encuentra rivales, y eso a pesar de haber disputado entre semana Liga de Campeones ante el Aalborg danés (28-42).

At. Valladolid -Barça 28-10-2022

Asobal

ATV

28

42

BAR

Alineaciones

Recoletas Valladolid
(12+16): Lamariano (Nico García, ps), Borja Méndez (4,1p), Álvaro Martínez (7), Martínez Ayres (1), Rosell (3), D'Antino (5,1p), Miguel Camino (3), Pablo Herrero (2), Dimitrioski (1), Gonzalo Díez (2,1p), Virulegio (-).

Barça
(23+19): Nielsen (Pérez de Vargas, ps (1)), Carlsbogard (4), Wanne (6,4p), Janc (6) Makuc (3), Richardsson (5), Frade (3), Reguart (2), Parera (3), N'Guessan (-), Urdangarín (2), Langaro (4), Ariño (3).

Parciales cada cinco minutos

1-4, 2-8, 5-12, 8-15, 9-18, 12-26 -descanso-; 16-26, 18-27, 20-30, 23-33, 26-37, 28-42 -final-.

Árbitros

Luis Ignacio Colmenero Guillén (castellano-leoné) y Víctor Rollán Martín (andaluz). Excluyeron dos minutos a Rosell (m.6), Martínez Ayres (m.28),/ Makuc (m.10 y 20), Parera (m.29), Urdangarín (m.42), Langaro (m.49).

Incidencias

Encuentro correspondiente a la octava jornada de Liga Asobal, disputado en el polideportivo Huerta del Rey ante 2.219 espectadores.

Si ya resulta complicado enfrentarse al Barça en condiciones normales, tratar de frenar a tan potente rival con siete bajas en las filas vallisoletanas resultaba imposible y, por tanto, el planteamiento de los locales fue probar jugadas y dar minutos a los menos habituales.

El Recoletas pudo empatar a un gol pero, a partir de ese momento, el cuadro catalán se hizo con el total dominio del juego, haciendo valer la envergadura, velocidad, calidad y efectividad de sus jugadores.

Cada fallo de los "gladiadores azules" se traducía en un nuevo gol para el casillero azulgrana, sobre todo, a través de Janc, que aprovechó las exclusiones de los vallisoletanos para anotar con comodidad a puerta vacía.

A la férrea defensa catalana se añadía la capacidad de intimidación de Nielsen, que se convirtió en una pesadilla para los lanzadores locales, entre los que pudo hacerse con cierto poderío Álvaro Martínez, desde el pivote.

Así, sin apenas despeinarse, el Barça llegaba al descanso con once goles de renta (12-23), que pudieron ser más, de no ser por las buenas actuaciones de Lamariano en la meta azulona.

Tras la reanudación, el Recoletas aumentó la intensidad defensiva, para tratar de competir al máximo ante un Barça netamente superior, lo que le permitió dejar la ventaja visitante en menos de diez goles (18-27).

El juego con el pivote de los locales les dio cierto rédito de cara a la portería azulgrana, dentro de su capacidad y limitaciones, puesto que los catalanes no perdonaron las pérdidas de los vallisoletanos, para seguir añadiendo goles a su casillero, hasta el 28-42 final.