El Barça, a recuperar la alegría ante el duro Wisla Plock

El Barça regresa este jueves a la Champions tras un duro fin de semana en el que dejó escapar vivo al Füchse Berlin en las semifinales de la Super Globe para levantarse el domingo y acabar tercero con una victoria ante el Kielce a imagen y semejanza de lo sucedido en la Final Four de la máxima competición europea.

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Y lo hace a las 20.45 horas en la pista del Orlen Wisla Plock, el subcampeón de las últimas 12 Ligas Polacas (siempre tras el Kielce) que dirige el catalán Jordi Sabaté y que no encuentra el ritmo en esta Champions con una victoria y cinco derrotas.

Los principales referentes del cuadro polaco son el extremo izquierdo polaco Przemyslaw Krajewski, el experimentado meta croata Mirko Alilovic (38 años y ex del Pick Szeged) y el 'cerebro' esloveno Miha Zarabec (central). Por cierto, que cuenta con tres jugadores españoles: Niko Mindegia, Gonzalo Pérez Arce o el pivote exbarcelonista Abel Serdio.

La lectura positiva es que en una temporada con problemas en las posiciones de central y de pivote los azulgranas han vapuleado al Magdeburgo y han tenido a su merced a los ‘Zorros’. La negativa es que el equipo lleva tres derrotas seguidas en partidos a cara o cruz (en las dos últimas Super Globe y en la pasada Final Four de la Champions).

"Tenemos ganas de levantar la cabeza y ganar otra vez. La derrota contra el Füchse nos dejó un poco tocados a nivel moral, pero el equipo volvió a competir al día siguiente casi sin recuperación", comentó en un previa Carlos Ortega que sigue contando con el joven Petar Cikusa a tres semanas de la mayoría de edad y que dejó fuera por decisión técnica a Jaime Gallefo y a un Haniel Langaro que sigue sin recuperar la confianza.

"Quizás sean la defensa más agresiva de la Champions. Si no la lees bien, te hace tirar siempre tocado y en posiciones muy malas", avisó en referencia a buen seguro a los balcánicos Leon Susnja (croata) y al veteranísimo bosnio Mirsad Terzic, de 40 años, un jugador de esos que no hacen prisioneros.

El lateral derecho Melvyn Richardson tiene claro que les espera "un partido muy difícil. El Wisla Plock juega bien en su casa y el público aprieta bastante. Son muy físicos y meten mucha intensidad, principalmente en defensa. Ellos saldrán ya con mucha intensidad y hay que estar preparados".