COCHES ELÉCTRICOS

Leyendas urbanas sobre el coche eléctrico

Los prejuicios sobre los vehículos eléctricos son muchos. Además, la mayoría de ellos son falsos.

Coche eléctrico

Coche eléctrico / AGENCIAS

 Si estás pensando en comprarte un coche eléctrico pero los comentarios de la gente están empezando a hacerte dudar de tu propósito, debes conocer la realidad de todos estos falsos mitos que corren acerca de este tipo de vehículo. Y, aunque para muchos los inconvenientes que presenta el eléctrico tienen aún mucho más peso que las ventajas, es importante que seas tú mismo quien compare sus puntos negativos y positivos.

Pero, sobre todo, no te encierres en lo convencional por el simple hecho de que haya sido así toda la vida, porque los cambios siempre traen consigo algún beneficio. ¡Atento! Porque estos son los diez falsos mitos que no debes creer acerca del eléctrico.

1. El eléctrico es más caro que el coche tradicional. Si bien es cierto que durante los inicios del eléctrico, también es verdad que su precio ha ido bajando. Actualmente, ya podemos encontrar modelos que ofrecen muy buenas prestaciones a un precio asequible. Además, se espera que en los próximos años el precio baje aún más, ya que la oferta irá creciendo con el paso del tiempo.

2. Alcanza menos velocidad. El Nissan Lead, por ejemplo, alcanza una velocidad autolimitada de 145 km/h, cifra que responde a los límites máximos establecidos en las carreteras europeas, por lo que nunca necesitarás conducir tu eléctrico a más velocidad de la que ya ofrecen.

3. Tiene poco impacto en la mejora de la calidad del aire. El óxido de nitrógeno y las partículas constituyen el problema principal de la contaminación de las ciudades por parte del tráfico. El uso generalizado de los eléctricos reduciría de manera drástica los valores de contaminación, por lo que el impacto en la mejora de la calidad del aire es innegable.

4. No ahorra tanto. A largo plazo, el coste de la batería de nuestro eléctrico sería cubierto con creces gracias al ahorro en combustible y al ahorro en mantenimiento, ya que los informes muestran que mantener un eléctrico es un 45% más barato que hacerlo con un coche tradicional.

5. Los seguros son más caros. De la misma manera que con el falso mito número uno, con este ha sucedido exactamente lo mismo. En un principio, el precio de los seguros sí que era más caro, pero este precio ha ido disminuyendo con el precio, hasta llegar a ser el mismo que el de las pólizas de los coches de combustión.

6. Hay poca infraestructura de recarga. Estamos de acuerdo en que los puntos de recarga aún deben crecer más de lo que ya lo han estado haciendo durante los últimos años. Aún así, este problema no debe resultarnos tan grave, pues la necesidad de carga del eléctrico –por norma general– debería ser cubierta en gran medida por el punto de carga de su aparcamiento habitual. Además, los puntos de carga en España siguen y seguirán creciendo.

7. Tiene poca autonomía. Este es otro mito que se hereda de los primeros modelos de eléctricos que existieron. Ahora, en cambio, los modelos de marcas como Nissan, Renault o BMW alcanzan los 300 y 400 kilómetros de autonomía.

8. Necesita más mantenimiento. Este falso mito es completamente falso. Los eléctricos necesitan mucho menos mantenimiento que los coches de combustión más tradicionales, ya que cuenta con un 90% menos de componentes como, por ejemplo, filtros, correas o embragues. Todos estos elementos de los que prescinde tampoco pueden averiarse, por lo que las reparaciones serán menos y el dinero invertido en mantenimiento será también inferior.

9. Tarda mucho en cargarse. Si nos acostumbramos a cargar el coche de noche, el problema desaparece. Además, esto tiene otros beneficios como que la tarifa nocturna es más barata y podrás ahorrar más dinero. Por otro lado, los puntos de carga rápida también están creciendo, con lo que el problema va desapareciendo.

10. Tiene menos prestaciones. Puede que este punto fuera cierto, pero diez años atrás. Sin embargo, ahora los nuevos modelos incorporan equipamiento como dirección asistida, aire acondicionado, sistema telemático o cámara e visión 360º. Nada más lejos de la realidad.