Adiós, Beetle

Volkswagen se despide de uno de sus coches que ha marcado nuestras carreteras durante muchos años: el Volkswagen Beetle. 

Lo ha anunciado Frank Welsch, director de I+D de la marca, en una entrevista que no se ha podido obviar durante todo el bullicio que ha generado el Salón de Ginebra. El hecho es que Volkswagen está trabajando en nuevos modelos y propuestas que se caracterizan por su espíritu aventurero y 'hippie', y la marca no ha considerado incluir el Beetle en este catálogo. 

La decisión se ha tomado después de ver las cifras de ventas que ha generado el modelo. A nivel global, en 2016 se vendieron 25.127 unidades. Su éxito queda sustituido por el del Volkswagen Golf, que tan solo durante el mes de enero de 2017 pudo registrar 37.645 unidades vendidas. Por lo tanto, Volkswagen concentra sus esfuerzos en aquello que funciona y marca el rumbo hacia la electrificación a partir de aquellos modelos que ya han resultado exitosos.

Un ejemplo de estos coches que han supuesto un antes y un después histórico para la marca es la clásica furgoneta T1, que Volkswagen transformará en el I.D. Buzz. En este caso, la marca alemana se aprovecha de toda la estética retro y 'hippie' de modelos como su clásico furgón y el Beetle para convertirlos en esta propuesta moderna y eléctrica que se empezará a fabricar en 2022. Los amantes de Volkswagen que busquen un descapotable pronto podrán optar por una versión cabrio del T-Roc.

La historia del Beetle se remonta al 1938, cuando Volkswagen creó un coche con voluntad popular. Éste se fabricó hasta el año 1978, y fue recuperado en 1997 como un 'revival' de la era 'hippie'. El último Beetle que conocemos es el de 2017, que, posiblemente, se ha ganado un puesto en los grandes libros de historia de la automoción.