ASTON MARTIN VALKYRIE

Aston Martin renueva el Valkyrie, su hypercar

El hiperdeportivo de Aston Martin se adelgaza y, por primera vez, muestra como será su interior.

El Valkyrie se muestra bastante diferente en las nuevas imágenes.

El Valkyrie se muestra bastante diferente en las nuevas imágenes. / ASTON MARTIN

Àlex Soler

Àlex Soler

El mundo del motor espera con ansia ver sobre el asfalto el nuevo <strong>Aston Martin Valkyrie</strong>, el hypercar que la firma británica lleva un tiempo desarrollando. Después de varias semanas sin saber de él, la marca ha desvelado nuevas imágenes en las que el vehículo se muestra cambiado, a mejor, y en las que ha sufrido cambios mecánicos para hacerlo aún más extremo. 

Aston Martin ha reestilizado su hiperdeportivo con mejoras aerodinámicas y lo ha sometido a un régimen severo para conseguir que pierda algo de peso y su relación masa potencia sea inferior a 1:1. El 'nuevo' Valkyirie es más alto que el conocido hasta ahora, hecho que ofrece un acceso más cómodo al habitáculo. Además, en cuanto al exterior se refiere, la marca lo ha simplificado al máximo, destacando las líneas rectas y las formas planas, que mejoran la aerodinámica del bólido. 

El Valkyrie renovado no se anda con tonterías y ha desechado todo lo que podía estorbarle para conseguir su cometido, ser muy rápido. Como antes de sufrir el cambio, el hypercar británico sigue renunciando a los retrovisores, en su lugar usa cámaras traseras para mostrar al conductor todo lo que necesita. Siguiendo en esta tónica, los focos del Valkyrie dejan ver todo su cableado y bombillas y se ahorra embellecedores para hacerlos mucho más ligeros que el resto de ópticas de Aston Martin. Por otro lado, y como dato curioso para dar más fuerza a este hecho, la marca ha dispuesto su logo en el capó en aluminio de 70 micras de espesor. La marca no quiere que se escape ni un solo gramo de más de donde pueda ahorrárselo.

La firma británica no ha dado datos sobre una mejora del rendimiento o cambios en el motor, un propulsor V12 atomsférico que, combinado con un motor eléctrico, desarrolla más de 1.000 CV. Aun así, con la dieta a la que ha sido sometido, es de esperar que el Valkyrie haya ganado en prestaciones y, sobre todo, en aceleración.

POR FIN VEMOS EL INTERIOR

Además de rediseñar su exterior para hacerlo más efectivo, Aston Martin ha mostrado por primera vez el interior de su hypercar. Una vez abiertas las puertas del tipo ala de gaviota, el interior del Valkyrie se ve parecido al de los prototipos utilizados en el mundo de la competición. Su misión es correr hasta no poder más y su interior acompaña para conseguir su cometido. El bólido británico montará solo lo necesario para ponerlo en funcionamiento, pues incorpora un volante, inspirado en los de la Fórmula 1, y tres pantallas, dos que harán la función de retrovisor y otra para controlar algunas opciones.

Los asientos, por su parte, van anclados al chasis, como en el Ferrari FXXK, y cuentan con dos posibilidades para los cinturones de seguridad. La de serie será un arnés con cuatro puntos de anclaje y, como opción, se podrá contar con seis puntos de anclaje.

Aston Martin asegura que estas imágenes equivalen al Valkyrie definitivo en un 95%, por lo que es casi el que se podrá ver en las carreteras en 2019 porque sí, será un coche matriculable. La firma británica prevé producir solo 150 unidades para carretera y 25 versiones de competición a razón de unos 3,5 millones de euros. El mundo del motor resta a la espera de que el fabricante revele los últimos detalles de uno de los coches más esperados.