A dos centímetros

El 'torbellino' Barshim amenaza el récord de Sotomayor

El catarí Mutaz Barshim saltó 2.40 metros en su primera aparición del año y se confirma como el mejor candidato para batir el histórico récord de Javier Sotomayor

Mutaz Barshim, sin rival en el salto de altura

Mutaz Barshim, sin rival en el salto de altura / sport

Laura Ramos

El catarí Mutaz Barshim está llamado a ser uno de los grandes protagonistas del 2015. El saltador aspira a batir el histórico récord de altura de Javier Sotomayor y, tras su primera aparición en pista en la reunión de Banska Bystrica (Eslovaquia), queda claro que el cubano puede empezar a temblar.

El joven atleta (23 años) no tuvo rival al 'volar' por encima de los 2.40 metros convirtiéndose, además, en el líder del año bajo techo. Barshim se quedó a tan solo tres centímetros de su récord personal y a cinco de aquel gélido salto salmantino que hace 22 años convirtió a Javier Sotomayor en leyenda del atletismo. 

Desde entonces, pocos han sido los atletas que han optado verdaderamente a destronar a un atleta retirado en 2001 y con un palmarés en el que relucen especialmente el oro olímpico de Barcelona o los 6 títulos mundiales conquistados entre 1989 y 1999. Pero Mutaz Barshim sí parece decidido a acabar con su alargada sombra.

Sin límites

Subcampeón del mundo en 2013 y campeón indoor en 2014, el que fuera medallista olímpico en Londres con tan solo 21 años sigue depurando su técnica a pasos agigantados tras su debut internacional en 2010. Hijo de una familia acomodada del pequeño emirato árabe, Barshim creció entre el tartán y las zapatillas de clavos de su padre y pronto optó por el atletismo como pasatiempo juvenil.

Graduado en la Sports Academy de Catar, Mutaz se estrenó a nivel internacional con récord nacional (2,25 metros) tras probar fortuna en el foso de la longitud. Y, desde aquella reunión en Gotenburgo, no se ha cansado de acumular éxitos. Ese mismo año, el espigado atleta catarí se proclamaba campeón del mundo júnior con un salto de 2.27 metros e iniciaba un ascenso meteórico que le ha convertido en un auténtico ídolo en su país.

Entre talonario y nacionalizaciones, los éxitos de Mutaz Barshim se han convertido en un ejemplo a seguir entre los más jóvenes de un país que empieza a despertar a nivel deportivo. El de Doha ya es el segundo mejor de todos los tiempos, pero quiere ser el número 1. Bondarenko se presenta como su gran rival en el Mundial que se disputará el próximo verano en Pekín. El ruso tiene 2.42 metros como plusmarca personal y parece el único capaz de frenar al torbellino catarí que, con 1.92 metros de altura, no se cansa de romper barreras.