La Supercopa, palanca de Lewandowski para recuperar su mejor versión

El delantero del FC Barcelona no está atravesando por su mejor momento esta temporada y aspira volver en esta competición a su mejor nivel.

Lewandowski, en el momento del cambio

Lewandowski, en el momento del cambio / Javi Ferrándiz

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No está siendo ni mucho menos mejor el mejor año de Robert Lewandowski. El polaco, seguramente, contagiado tambíen por el discreto juego del equipo de Xavi Hernández, solo ha podido materializar 10 tantos en lo que va de temporada (sumando Liga, ‘Champions’ y Copa) y sus sensaciones en el campo tampoco están siendo las mejores, pareciendo en muchos casos estar desconectado del fútbol que despliegan sus compañeros.

La diferencia con respecto a la pasada temporada es notable. Las cifras lo dicen todo. A estas alturas, el polaco había anotado justo el doble de dianas 20 (15 en Liga y cinco en Europa), y era el máximo artillero de forma holgada de la Liga. Y en la ‘Champions’, a pesar de la eliminación azulgrana, fue también uno de los máximos realizadores de la fase de grupos.

El bajón, en 365 días, es más que evidente y hay quien se pregunta que, si con la llegada de Vitor Roque, Xavi debe dejar al delantero polaco en el banquillo en favor del brasileño. Sin embargo, y teniendo en cuenta la mítica frase de Jorge Valdano de que el fútbol es un estado de ánimo, Lewandowski debe continuar siendo el delantero titular del equipo, al menos en la Supercopa.

Una competición fetiche para Lewandowski

Y es que este torneo, históricamente se le da especialmente bien al delantero polaco, en todos los equipos con los que ha jugado. En su palmarés, cuenta con ocho títulos y como no podía ser de otra manera, fue decisivo para la consecución de todos ellos llegando a anotar 10 tantos.

Los dos últimos fueron ya con la camiseta blaugrana la pasada temporada, uno en la semifinal ante el Betis y el otro en la gran Final ante el Real Madrid. Este encuentro ante los blancos fue seguramente, sino el mejor, uno de los mejores partidos de la era Xavi, y en la cabeza de ambos, está el volver a asimilarse lo más posible a aquel día, en el que el Barcelona pudo barrer al Real Madrid y Lewandowski hacer un gran partido, para acabar levantado su primer título como blaugrana. Pero antes de pensar en la final, el Barça tendrá que vérselas en semifinales ante Osasuna, en una eliminatoria en la que según los pronósticos de Betfair son claramente favoritos para pasar de ronda con una probabilidad implícita del 85,47%.

Lewandowski, dominador europeo de Supercopas

El delantero ha sido capaz de levantar este título con cuatro equipos diferentes. Cronológicamente hablando, primero lo hizo con el Lech Poznan en su Polonia natal. Más tarde, siendo ya futbolista del Borussia Dortmund lograría imponerse al Bayern Múnich en la temporada 13-14, en un encuentro en el que curiosamente no logró materializar ninguno de los cuatro tantos de su equipo que se impuso a los muniqueses por cuatro goles a dos. Y a partir de 2016, ya con la camiseta del Bayern logró cinco de las seis Supercopas alemanas disputadas (todas menos la 19-20), para acabar terminando con la conseguida la pasada campaña como azulgrana. Es decir, Lewandowski es campeón de seis de las últimas siete Supercopas que ha disputado.

La Supercopa 2024, un punto de inflexión

Esta competición, que tan buenos recuerdos le trae al Barcelonismo con la edición de 2023, la afronta el equipo azulgrana, de una manera especialmente ilusionante, sabedores de que además del título en juego, un triunfo en Arabia puede marcar un antes y un después en el devenir de la temporada como ya ocurriera la pasada campaña. Aquel contundente triunfo en el clásico ante los blancos fue una inyección de moral tremenda para la consecución final del título de Liga y sobre todo supuso tambíen el fin de un ciclo de victorias consecutivas del Madrid en los cara a cara, bautizado por Araujo como el comienzo de una nueva era.

En esta ocasión la Supercopa vuelve a ser una oportunidad pintiparada para los azulgranas, para recuperar la credibilidad, su mejor fútbol, y la mejor versión de un Lewandowski que en esta competición no ha tenido rival en los últimos años.