Bombazo perico ante un Atlético que ya sabe lo que es perder

S. Montes

Un golazo de Sergio García, cuando el partido agonizaba, deja tres puntos de oro para un Espanyol que vivirá unas navidades más tranquilas. Todo, ante un Atlético que cosecha su primera derrota de la temporada al sucumbir en un RCDE Stadium que recuperó el embrujo de sus mejores noches.

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Liga Santander

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Alineaciones
RCD Espanyol
Pau López; Aarón, Duarte, Hermoso, Javi López; David López, Javi Fuego, Darder (Granero, 86'); Leo Baptistao (Piatti, 71'), Gerard, Sergio García.
Atlético de Madrid
Oblak; Vrsaliko, Savic, Godín, Filipe Luis; Gabi (Augusto, 84'), Thomas (Correa, 62'), Saúl, Koke; Torres (Gameiro, 69'), Griezmann.

Un cuadro perico en crisis recibía a unos colchoneros lanzados, segundos en la tabla y a seis puntos del líder. Los de Sánchez Flores necesitaban la victoria como revulsivo y como confirmación de que su proyecto tiene viabilidad por delante. Todo, ante un rival que no había concedido ni una sola derrota hasta la fecha. Esas circunstancias con las que ambos afrontaban el partido quedaron diluidas por un planteamiento que no sorprendió a nadie, especialmente en el primer tiempo.

La misma intensidad, las mismas ganas y las mismas carencias. El juego quedó repleto de imprecisiones desde el pitido inicial. El Espanyol pareció querer enseñar el diente, pero pronto el Atlético dejó claro que no permitiría concesión alguna. Con todo, Baptistao avisó sobre su partido fallón a los 18 minutos en un balón muy bien filtrado por Sergio García que el brasileño remató mal con la zurda. El lógico equilibrio no impedía que los blanquiazules pareciesen más ofensivos y profundos, pero esa sensación cambió de bando y el equipo del ‘Cholo’ Simeone pasó a llegar con cierto peligro al marco de Pau López. Y lo hizo gracias a la figura de un Griezmann que empezó a rendir como enlace. A cinco minutos del intermedio, el francés protagonizó la acción más destacada en un rebote que cazó en el área, y en el intento de zafarse de Pau cayó ante la salida del meta. Pareció penalti, no lo fue y solo se vio otra llegada reseñable más antes del paso por vestuarios, pero Hermoso le birló a Torres la oportunidad de marcar.

Y en la segunda parte, de entrada, mucho más de lo mismo. Los acercamientos claros brillaban por su ausencia, con la misma tónica que en la primera mitad. Las faltas se sucedían en el centro del campo para cortar jugadas de ataque, y un último pase con acierto era una quimera. Simeone movió banquillo y centro del campo dando entrada a Correa por Thomas, pero lo que primero que se vio fue un remate franco de Sergio García tras un centro al corazón del área de Gerard Moreno. El Atlético le vio las orejas al lobo y respondió. Primero, con un cabezazo de Godín al fondo de las mallas, pero quedó anulado por falta previa sobre Duarte. Y después, desperdiciando la oportunidad más clara hasta el momento en un mano a mano de Gameiro que el ariete culminó de la peor manera posible ante Pau cuando lo tenía todo a su favor. Los errores generaban ocasiones y ahí estaba el partido. Oblak atajó después un disparo centrado de Gerard Moreno, pero la acción no fue otra jugada aislada. Los pericos se crecieron y creyeron en sus opciones más que un Atlético sin el refresco esperado con los cambios. Y el castigo llegó. Buena conducción de Piatti y apertura en banda a un Granero que la puso pasada. Para cazarla estaba preparado un Sergio García que disparó cruzado para hacer estallar de alegría a su parroquia con el 1-0.