Djokovic sufrió de lo lindo para derrotar al japonés Nishikori

Djokovic contra Murray. Esa será la final de este domingo del Masters 1000 de Roma; la misma de hace tan solo una semana en la Caja Mágica de Madrid. Son los dos mejores jugadores del momento, como señalan las estadísticas. El serbio derrotó al japonés Nishikorii en un partido largo y trabajoso –sufrió de lo lindo– y podría acusar el cansancio (2-6, 6-4 y 7-6 mientras que el escocés apalizó en un visto y no visto al francés Pouille, por 6-2 y 6-1. 

Djokovic, sobre el papel, es favorito. Más intuitivo que su rival, brillante, genial en ocasiones... Suyo es el talento. Este sábado se vio sorprendido por el japonés en el primer set y sufrió lo indecible en el tercero (de 4-1 se pasó a 4-4). El serbio perdió dos veces su saque en el primer parcial pero logró reaccionar en los siguientes dos y selló su tercera final seguida en el Foro Itálico, en el que fue campeón en las últimas dos ediciones. ‘Nole’ es mucho ‘Nole’ y soportó el bombardeo de su rival. El duelo en la manga decisiva se resolvió en el tie break.

El británico Andy Murray, Nº 3 del mundo, accedió por primera vez a la final del Masters 1000 de Roma tras superar con absoluta claridad  al francés Lucas Pouille (52 del mundo) por 6-2, 6-1. El galo, sin embargo, merece un alto reconocimiento pues fue repescado de la fase previa tras la baja de su compatriota Wilfred  Tsonga. Eliminó a David Ferrer en octavos y se plantó en semifinales casi sin pretenderlo debido a la retirada del argentino Juan Monaco. 

Murray, finalista la semana pasada en Madrid, solo necesitó 59 minutos para derrotar a su rival en un partido marcado por la lluvias. “Roland Garros empieza pronto y no hay mejor forma de prepararse que enfrentarse a los mejores del mundo. Me encuentro muy bien”, dijo el escocés. Murray cumplirá este domingo 29 años y el lunes será número dos del mundo –le arrebatará ese puesto al suizo Roger Federer–.