Davidovich conquista ante Alcaraz su segunda Copa del Rey consecutiva
El número 35 del mundo se impuso por 6-4 y 6-1 en una hora y ocho minutos de partido
El malagueño, que ya levantó el trofeo el año pasado, repitió victoria con autoridad
EFE
Alejandro Davidovich, número 35 del mundo, conquistó su segunda Copa del Rey consecutiva en las instalaciones del Recreativo de Huelva al derrotar a Carlos Alcaraz, séptimo del ranking, por 6-4 y 6-1, en una hora y ocho minutos.
El tenista malagueño, que levantó el trofeo el año pasado, repitió victoria con autoridad en la nonagésimo séptima edición al superar al favorito y gran estrella del cartel onubense.
Además, será el primer jugador en llevarse a casa una réplica exacta de la Copa de 1912, que este año empieza a entregarse al ganador en lugar de la clásica carabela de plata. Ambos finalistas brindaron un gran juego a los más de 2.300 espectadores que asistieron al duelo.
En los primeros cuatro juegos de la final ambos jugadores defendieron su servicio y mostraron un alto nivel. Demostraron una gran movilidad dentro de la pista para llegar a los potentes y angulosos golpes que fueron conectando, para deleite del público.
En el quinto juego Alcaraz aprovechó los fallos de Davidovich para romper su saque (3-2). Sin embargo, no tuvo continuidad. Con su servicio fue de más a menos y de un 40-0 pasó a encajar una rotura que permitió a Davidovich igualar de nuevo el marcador (3-3). El malagueño se creció y dominó con golpes profundos y además dejó su firma en un espectacular globo antes de certificar el 4-3.
Alcaraz logró igualar al saque y presionar al resto a Davidovich, que logró levantar un 15-40 y en un gran intercambio de tiros en la red seguir por delante (5-4). De nuevo al saque, el de El Palmar firmó un golpe por debajo de las piernas que liberó un gran “oh” en la grada, pero aún así Davidovich fue mejor y se llevo el set por 6-4 en 44 minutos de juego.
En el arranque de la segunda manga Davidovich siguió su con inercia ganadora. Con seguridad, defendió su servicio y puso contra las cuerdas a Alcaraz hasta que le rompió el saque, a lo que siguió un juego en blanco para establecer un claro 3-0.
Con el encuentro cuesta arriba, Alcaraz se afanó en buscar más primeros servicios y abrir ángulos, pero se encontraba en frente a un Davidovich que lo devolvía todo, con más potencia si cabe, y el murciano acababa fallando. Encajó el 4-0 y el 5-0. El malagueño estaba entonado y hasta se permitía dejadas lejanas, mientras que el de El Palmar se veía ofuscado.
Aún así logró con claridad salvar el 6-0 y siguió tratando de retrasar la derrota. Pero Davidovich estaba firme en el saque y no permitió que la final se alargara más. Ganó el séptimo juego en blanco para cerrar un set de 24 minutos y conquistar su segundo título consecutivo de la Copa del Rey.
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