Resumen del tercer capítulo de Master Chef Temporada 8

Tras la <strong>doble eliminación de Adrienne y Mónica</strong> en el segundo episodio de la temporada de Master Chef, los aspirantes han tenido que superar una prueba en la que el programa de Televisión Española ha querido reivindicar el papel del pequeño agricultor y de las verduras ecológicas, pues los aspirantes a cocineros se han encontrado justamente frutas y verduras ecológicas para realizar un plato sencillo y ninguna floritura. Algunos de los concursantes han entrado igualmente al supermercado a buscar más ingredientes, mientras que Saray ha decidido no coger nada más, ya que ha consideró que ya tenía suficiente con lo que le había dejado el programa: sólo cogió romero y se lo dio a Fidel "porque le cae muy bien". 

Tras finalizar el tiempo para elaborar los platos, los primeros en ser llamados para dar sus platos a probar a los chefs fueron Fidel y Sara. Fidel preparó un pisto en cierto modo haciendo un homenaje a Elena Furiase, aunque el plato no era el ideal para lo que había preparado. Fue tachado de horroso en cuanto a la presentación por Pepe, y Jordi le dijo que era "un sin sentido". Sara Lúa optó por dedicarle el plato a Adrienne, haciendo una plato combinando fruta y verdura, mejor presentado que el de su compañero y también fue tachado de incoherente por Jordi, que le dijo que la crema que había preparado "estaba mala". Los rivales Andy e Iván fueron los siguientes, el segundo preparó una crema de verduras con un pincho de verduras; al que Samantha le dijo que daba gusto ver un plato bonito. Jordi le dio a probar el plato de Iván a Andy, que dijo que "no sabe mal". Pero puso tantas verduras que los jueces no supieron elegir el sabor. Después le dijeron que era bonito pero muy malo. Andy le dedicó su plato a un amigo llamado Manolo que está pasando por mal momento, pero que no estaba acabado de terminar.  Otra vez Jordi le dio a probar el plato a Iván, que le dio el mismo veredicto que su compañero: "no está mal". También Pepe le dijo al abogado que el plato era una idiotez, demasiadas cosas que quitaban el sabor de las verduras, que tenían que ser los principales protagonistas. Otra vez, Jordi le dijo a Andy que su plato era pretencioso. El plato de Saray estaba a medio hacer según los jueces y excepto Elena Fuirase, los demás dijeron que estaba malo. El preparado de Michael era ensaladilla rusa con remolacha, de modo que quedaba en un color rosado tachado de feo por Samantha, pero también se quedó a medio camino mal resuelta. El plato de Michael según Samantha era un paso atrás en su modo de cocinar. Luna presentó el plato diciendo "A Liar el taco" porque los jueces son "demasiado exigentes", que la "lían" con todos los aspirantes. A pesar de esto, el plato les gustó a los jueces y repitieron comiendo directamente de la paella de Luna, que se emocionó tanto como los paladares de los chefs. La siguiente fue Sonsoles, que realizó unos saquitos rellenos de pisto y alcachofas, también calificados como una cocina de verduras no apetecible y a medio hacer. Juana, la veterana del programa, les presentó a los cocineros un pisto con huevo frito con el que todos mojaron pan, rico y bien guisado, con la única pega de Jordi que le pidió evolución en la cocina. Por su parte, Teresa, la del columpio, presentó una crema de calabacin sin piel, y por ende sin color, que fue un "buen punto de partida" según comentó Pepe. A los demás, Jordi les dijo que "ninguna otra crema de verduras estaba rica". El siguiente a preparar una crema de calabacín fue Alberto, el amor platónico de Luna, con el que Jordi hizo el gesto de vomitar. Rosa la militar  también hizo un pisto con alcachofa y chips de patata con un toque dulce pero que no fue suficiente para convencer a los chefs. Ana preparó falsos raviolis de remolacha con un toque cítrico que sorprendió a los cocineros, diferenciándose de las cremas y los pistos que presentaron el resto de concursantes. El último en presentar su plato fue Jose Mari, que hizo un gazpacho de remolacha que Samantha calificó de "muy malo". Por su parte, las palabras de Jordi fueron que "esto es una porquería", mientras el aspirante dijo que para él estaba bueno, haciendo que Jordi se enfadara y les dijeron a él y a todos que nunca más le replicasen que eran los más contestones de todos los programas de Master Chef. La cata terminó con el enfado de Jordi Cruz, y despidieron a Elena Furiase antes de pasar a la deliberación del jurado, que tuvo claro que los aspirantes son aburridos porque solo preparon puré o pisto, y piden algo más en Master Chef. Cuatro aspirantes no aprovecharon las verduras según el jurado: Alberto, Sara Lúa, Iván y Jose Mari. En cambio, los dos mejores aspirantes para esta prueba por el respeto y mimo con el que trataron las hortalizas fueron Luna y Ana. Pero la ganadora fue Luna, que no cabía en ella misma de la ilusión que tenía. 

En cuanto a la prueba de exteriores, el equipo de Master Chef se desplazó hasta Murcia que ostenta el título de la Capital de la Gastronomía Española 2020, donde Luna tuvo el privilegio de formar 1 equipo de 4 aspirantes y otros dos equipos de 5 aspirantes. Chema, Sonsoles, Andy, Teresa (capitana) formaron el primero de ellos, el quipo blanco. Una vez más se demostró que el ambiente está caldeado entre los concursantes; Andy declaró que entre sus compañeros hay un complot para echarle tras quitarle minutos a  Iván. Sara Lúa, Saray, Iván, Juana y Ana (capitana) fueron el segundo equipo (rojo) y los restantes Luna. Rosa, Alberto (capitán), Michael y Fidel fueron los miembros del tercer equipo, el azul. El menú estaba formado por 9 tapas (3 por equipo) bastante elaboradas para 100 invitados, agricultores y productores de la zona. Samantha les pidió al equipo blanco que se movieran con más ritmo, mientras que Jordi se encargó de darles ánimos al equipo azul y también le reprochó a Saray que iba demasiado lenta. El catalán aprovechó que se encargaba del equipo rojo para hacer un poco las paces ante las cámaras con Iván después del encontronazo en la primera parte del  programa. El equipo blanco y el rojo llevaban un buen ritmo de cocinado, y se notaba que respiraba un buen ambiente entre ellos, mientras que el azul estaba demasiado alborotado. Pablo Gonzalez, Chef del Restaurante Cabaña Buenavista con dos estrellas Michelín de la región de Murcia visitó a los aspirantes y les dio su visto bueno a lo que estaba preparando el equipo rojo. En cuanto al equipo azul, prepararon una crema de berenjena sin haberle quitado la piel, y bajo el consejo de Pablo Gonzalez intentaron mejorar el desastre que habían hecho, pero los nervios estaban ahí aflorando entre los miembros del equipo. La visita del chef de 2 estrellas al equipo blanco también sirvió para mejorar el gusto final de las tapas gracias a sus experimentados consejos y al nervio que sacó Samantha después de probar una de las tapas que no tenían ningún sabor. 

Ninguno de los tres equipos falló en el tiempo para sacar la primera de las tapas a los comensales que se encontraban delante de la Catedral de Murcia. La que más gustó al jurado fue la que elaboró el equipo rojo. En cuanto a la segunda de las tres tapas que tenían que preparar los equipos, hay que decir que salieron a tiempo también pero el equipo azul hizo mal la salsa de la carrillera y se dejó las alubias.  En cuanto a la tercera y última tapa, Jordi les recriminó que pusieron demasiado alcohol al chupito, Pepe les dijo que su tapa no sabía a nada y el equipo rojo, a pesar de que Saray le dio con la paella en la cabeza de Iván, volvieron a ser los más cohesionados y con mejor trabajo en equipo. 

Una vez ya estaban todas las tapas degustadas, llegó el momento de felicitar a los aspirantes tras conseguir sacar el reto adelante, que no era nada sencillo. Uno de los tres equipos se libró de la eliminación, y por lo visto durante la cocina, Alberto no fue un buen capitán para el equipo azul, Rosa también fue criticada por Pepe por su modo de trabajar, y Alberto le recriminó a Luna que parece que todo se lo toma en broma. Samantha felicitó al equipo blanco por la menestra, pero les dijo que le molesta que no le hagan caso. El chupito de Any volvió a ser reprochado por Jordi. En cuanto al equipo rojo, los chefs admitieron que la cocina funcionó pero Ana no ejerció el papel de líder a pesar de que había asumido la capitanía, e Iván fue felicitado por Jordi por su arroz que fue "uno de los más ricos que hemos sacado en Master Chef". Dicho esto, el equipo rojo fue el ganador de la prueba de exteriores y se salvó de la eliminación. Iván fue coronado como el mejor aspirante de la prueba. 

La tercera y última prueba acabaría con al expulsión de uno de los aspirantes, entre los que estaban los que formaban el equipo azul y el equipo blanco, aunque uno de los momentos más carismáticos los marcó una especie de "discusión de pareja" entre Luna y Alberto. Ya entrando en materia, Iván tuvo la oportunidad de salvar a uno de sus compañeros, y por afinidad eligió que Fidel debía ser salvado sin tener que pasar esta prueba. Éste se sacó todos sus amuletos de los bolsillos y los repartió entre los demás compañeros que se quedaban en los fogones.  Lo siguiente que tuvo que hacer Iván fue elegir a uno de sus compañeros que se habían salvado para que se enfrentar en la prueba de eliminación, por lo que con mucho criterio eligió que Fidel volviera a bajar con el resto de delantales negros. Sobre esta ventaja, Andy dijo que él no lo hubiera hecho así y hubiera hecho bajar a Sara Lúa, por lo que se ganó el comentario de Pepe como el de "el abogado del diablo". 

Así pues, los aspirantes se encontraron un pollo, y Luna se quejaba enérgicamente porque "no le gusta deshuesar un pollo". Entonces llegó el momento en el que Jordi se puso un antifaz, cogió un cuchillo y con los ojos tapados deshuesó por completo el pollo. Sacó las pechugas, cortó las patas en jamoncitos, sacó los contramuslos y lo dejó limpio como lo hace cualquier experto en carnicería. Los aspirantes también tuvieron que ponerse un antifaz que  se encontraron en el cajón y.... resultó ser una broma. Debían cortar el pollo como Jordi pero con los ojos abiertos y en tan solo 2 minutos. Rosa, Alberto y Teresa terminaron antes de tiempo, y el resto de aspirantes no consiguieron despiezar el pollo en el tiempo establecido por el programa. La mejor de los tres que acabaron antes de tiempo fue Teresa, los otros dos se dejaron bastante carne, sobre todo de las pechugas. 

Al final del examen, los jueces dijeron que los dos aspirantes que mejor despiezaron el pollo fueron Teresa, que terminó antes de tiempo, y Jose Mari, que lo hizo bastante bien a pesar de que le quedó una pieza por sacar. Por lo tanto, se libraron de cocinar en esta prueba de eliminación, por lo que continúan una semana más en Master Chef. El resto tuvieron que seguir demostrando que son dignos de Master Chef preparando el pollo de 4 cocciones diferentes bajo la supervisión de Higino Gómez, reconocido por abastecer de aves a los mejores restaurantes del país. Sonsoles, Michael, Andy, Alberto, Fidel, Luna y Rosa se enfrentaban al guiso, al pollo a la plancha, a una fritura, y horno que tenían que elaborar con el citado pollo y todo con guarnición que pudieron coger de su supermercado. 

Rosa en esta prueba estaba atacada de los nervios y se le quemó la cebolla dos veces, Michael era el que más tranquilo estaba, Fidel le pegaba demasiadas vueltas a todo, Alberto también iba muy rápido y Luna, al igual que Rosa, estaba atacada de los nervios. Sonsoles también estaba agobiada, mientras que Andy iba con paso ligero pero firme. Sonsoles fue la primera en dar sus platos a probar a los chefs; utilizó bien todas las partes pero no las aprovechó bien. La segunda aspirante en la prueba de cata fue Luna, que reconoció haberlo pasado muy mal durante la elaboración de los platos, que les gustaron a los jueces. Michael fue el tercero en presentar sus elaboraciones, aprovechando también todas las partes del pollo, enamorando sobretodo a Pepe, que como sabéis es amante de la cocina casera. Presentó cuatro platos buenos, pero demasiado básicos. Andy siguió a Michael en esta prueba, que tenía algunos fallos como la grasa excesiva en el guiso y bastante superficial según Jordi. En este caso, fue Samantha la que tachó de pretencioso a Andy. El siguiente en presentar su examen de pollo fue Alberto, que no consiguió hacer el guiso bien hecho, y los demás platos fueron demasiado juveniles. El carismático Fidel hizo un trabajo demasiado justo, mostró su cara más inseguro a la hora de cocinar y esto se notó en el resultado final, reuniendo todos los defectos que habían mencionado a todos los aspirantes anteriores; incluso el rebozado estaba crudo y malo según palabras de Samantha. Por último, Rosa ya sabía que sus platos no estaban bien después de los problemas de nervios que había tenido en el momento de cocinar. Se notó en las palabras de los jueces que calificaron los platos de Rosa como un "Game Over". 

Los mejores aspirantes de esta prueba fueron Luna, Michael y Sonsoles, que se llevaron el reconocimiento de los maestros cocineros y los aplausos de todos sus compañeros. Quedaban Andy, Alberto, Fidel y Rosa. Los dos más jóvenes, Alberto y Andy, se salvaron también y pudieron subir a la galería, de modo que quedaron solo Fidel y Rosa para ser eliminados del programa. 

Finalmente, el aspirante que abandonó las cocinas de Master Chef en el tercer capítulo de la temporada 8 fue, merecidamente por los platos de pollo que presentó a los chefs en la prueba de eliminación: Rosa.