Maldito diario: Doha, 22 de noviembre de 2022

Reconozco que la decepción es enorme. Y me pueden acusar de muchas cosas, sí. Pero que conste que he hecho lo que he podido para sacar a relucir todo el talento de los argentinos

Aunque estoy bien, con confianza. Aún nos queda mucho por delante. Concretamente, hasta que nos la juguemos el sábado contra México

7. Lionel Scaloni (Argentina) - 2.6 millones de euros

7. Lionel Scaloni (Argentina) - 2.6 millones de euros / EFE/AFP

SPORT by Panenka

Querido diario. Imagínate que obligas a alguien a madrugar, le haces estar pendiente de ti desde las siete de la mañana, pero todo sale mal y le acabas amargando el desayuno, el día y toda la semana. Te acabará odiando, y con razón, ¿verdad? Pues eso es lo que me ha pasado a mí con 45 millones de personas a la vez. Reconozco que la decepción es enorme. Y me pueden acusar de muchas cosas, sí. Pero que conste que he hecho lo que he podido para sacar a relucir todo el talento de los argentinos.

Vale, igual no lo he conseguido con mis jugadores; pero al resto de compatriotas les he dado la oportunidad de demostrar su creatividad... a la hora de inventar insultos. En la victoria, pero, sobre todo, en la derrota, somos insuperables. Aunque estoy bien, con confianza. Aún nos queda mucho por delante. Concretamente, cuatro días hasta que nos la juguemos el sábado contra México, con el riesgo de quedar eliminados a las primeras de cambio. Por lo menos, a los hinchas argentinos que llevan ya dos o tres semanas en Doha pasando calor y teniendo que pedir un crédito para tomarse una cerveza tampoco les parecerá tan mal volver a casa.

Venga, alejemos los pensamientos negativos. Lo repito: tenemos que mantener la cabeza alta. Literalmente. Porque no estaría mal levantar la cabeza para intentar dar dos o tres pases seguidos o para ver dónde están los rivales y no caer siempre en fuera de juego. Y tampoco pasaría nada si Messi levantara la suya, que sale en todas las fotos como si acabara de perder su última oportunidad de ganar un Mundial. ¡Y eso no ha pasado! Todavía. Hay que animarle, decirle que hay trenes que solo pasan una vez en la vida. De acuerdo, el suyo quizá ya haya pasado. Pero, ¿y la Scaloneta? ¡Todos a bordo! Ya ves que aún no hemos arrancado. Y hay más sitio que nunca, ahora que tantos se quieren bajar. No es especialmente segura, ni rápida, y no aguanta un solo choque, como ha quedado demostrado contra los saudíes. Pero es lo que tenemos. Es eso o ir andando. ¿Qué es mejor? A Messi, mejor no se lo pregunto.

Lionel S.