Bergantiños se retira sangrando y en camilla tras una entrada temeraria

Susto mayúsculo en Riazor. El deportivista Álex Bergantiños debió abandonar el terreno de juego en camilla a los 43 minutos de la ida de la final del play-off de ascenso frente al Mallorca después de una temeraria entrada de Marc Pedraza.

La acción sucedió de forma fortuita, en un balón dividido en el centro del campo. Ambos futbolistas fueron con todo, por los pies por delante, con tan mala suerte que el bermellón golpeó directamente con los tacos a su oponente entre el pecho y la boca.

De inmediato, Pedraza se dio cuenta del dolor causado. Entre signo de arrepentimiento pidió perdón y pidió la entrada de las asistencias, llegando a ser arropado por el entrenador rival, José Luis Martí, consciente de que la acción había sido tan temeraria como involuntaria.

El partido se detuvo, el mallorquinista fue expulsado con roja directa y Bergantiños debió abandonar el campo en camilla. Con sangre en el rostro y evidentes muestras de dolor, pero plenamente consciente. Las informaciones más recientes apuntan a que el jugador solo habría sufrido un corte y estaría siendo trasladado al hospital por precaución.