La Copa Catalunya, un oasis en el desierto del Andorra

La conquista de la Copa Catalunya ha supuesto una inyección de moral para el Andorra. "Estamos un poco necesitados de este tipo de alegrías", confesó el propio Eder Sarabia tras el partido. Y es que, tras cinco derrotas consecutivas en liga, el cuadro tricolor necesitaba una alegría, y esta llegó en forma de agónica victoria ante el Badalona Futur.

Una vez celebrado el título, la vista del vestuario se clava en el próximo compromiso liguero. El domingo 19 de febrero aparece marcado en rojo en el calendario, ya que el Estadi Nacional recibe la visita de un necesitado Sporting de Gijón. Una victoria ante los asturianos, también necesitados de puntos, daría oxígeno al cuadro del Principado para alejarse de los puestos de descenso, peligrosamente cercana tras los últimos resultados.

En líneas generales, el vestuario al completo necesitaba una alegría como la del pasado martes. Pero si alguien salió reforzado del triunfo copero, ese fue Sinan Bakis. Tras cinco jornadas sin ver puerta, su gol en el descuento ante el Badalona Futur no solo se tradujo en un título para el cuadro tricolor, también permitió que el ariete turco se despojase de esa pesada carga.