Mahrez, de bien nacido es ser agradecido

Alrededor de Riyad Mahrez existen no pocas leyendas referidas a su carrera deportiva, a cual más curiosa, entre la que afirma que en 2010, cuando jugaba con el Quimper, en la cuarta división francesa, rechazó los ofrecimientos de PSG y Olympique Marsella para fichar por el Le Havre, de segunda categoría.

El medio francés, hoy internacional argelino, tenía 19 años en aquella época y con lo que le había costado ganar presencia en su equipo debió pensar que en un grande nadie querría arriesgar con él.

Esa, se especula, podría ser una de las razones por las que no dejaría el Leicester. Antes del mercado de invierno cortó, de raiz y en primera persona, todos los rumores que apuntaban a un traspaso millonario porque “el Lester me vino a buscar cuando nadie me conocía”... Pero ¿y en verano? “Mahrez es vital en el Leicester pero habría que ver cómo encajaría en otro equipo” se afirma alrededor del club, donde el futbolista no solo goza de la consideración de crack, sino que disfruta, por expreso deseo de Claudio Ranieri, de una libertad futbolística y personal que no se entendería en otro sitio.

“Es un tipo agradecido y mantuvo buena relación con Pearson, que le fichó... Pero con Ranieri es especial” se afirma desde el vestuario, donde la calidad de Mahrez despierta elogios de todo tipo. “Parece introvertido, pero no lo es con quien tiene confianza”, explican desde el club, con cuyos empleados el jugador tiene un trato muy cercano.

“Ganaremos la Liga” se limita él a decir a quien le pregunta, convencido como está de soportar la presión que llega desde Londres. “Es un privilegiado en el campo, porque ve las cosas medio segundo antes que lo hagamos los demás. Esos pases imposibles que hace... Parece pensarlos antes de tener incluso el balón” asegura un compañero de vestuario, mientras que entre los periodistas que siguen habitualmente al Lester la unanimidad es también absoluta: “Es uno de los secretos de este equipo”.

¿Seguirá siéndolo el año que viene? El caramelo de la Champions es tentador y la felicidad que siente también. De hecho la fidelidad de Mahrez está probada: no quiso saber nada de un traspaso en el mercado de invierno... Porque quería ser campeón con el Leicester.