¿Son malos los auriculares para el oído?

Según cuentan desde Audifon, "se han elaborado estudios que relacionan la pérdida de audición con la utilización de auriculares"

Desde la Harvard Health Publishing, publicación oficial de la Harvard Medical School, afirman que existe un uso saludable de los auriculares

AURICULARES FUERA DE JUEGO

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SPORT.es

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Los auriculares supusieron una auténtica revolución. Gracias a ellos podemos hacer llamadas, ver series de televisión o vídeos de Youtube y, muy especialmente, escuchar música, sin ser molestados por los ruidos ambientales de nuestro alrededor. Sin embargo, siempre ha existido la idea de que son perjudiciales para nuestros oídos. ¿Es otro mito popular más o una realidad científica? Según cuentan desde Audifon, "se han elaborado estudios que relacionan la pérdida de audición con la utilización de auriculares". ¿Pero son siempre nocivos para nuestra salud o depende de la utilización que hagamos de ellos?

Desde la Harvard Health Publishing, publicación oficial de la Harvard Medical School, afirman que existe un uso saludable de los auriculares. Para empezar debemos atender obviamente al volumen. "El volumen máximo de los dispositivos para la escucha está por encima del umbral en que se produce el daño", agregan sus especialistas. Si bien es muy improbable que un sonido de alrededor de 70 decibelios cause daños en el oído, un volumen superor a 85 decibelios puede hacerlo y, a partir de los 105 decibelios, en apenas cinco minutos. Por tener una referencia, el volumen máximo de los móviles suele ubicarse en esos 105 decibelios.

Por tanto, resulta fundamental no explotar el volumen máximo de nuestro dispositivo. Pese a que la música pueda sonar mejor y disfrutarse más, la realidad es que estamos provocándole daños a la estructura interna de nuestro oído, bastante sensible. Además, también debemos considerar qué cantidad de tiempo estamos expuestos a ello. Si escuchamos música con los auriculares a decibelios saludables probablemente podamos hacerlo durante horas sin comprometer nuestra salud. Con volúmenes más elevados debemos reducir el tiempo de exposición para protegernos. Debemos mantener una relación inversamente proporcional.

Además, añaden desde la Harvard Health Publishing, deberíamos tomar descansos después de sesiones de escucha prolongadas. Esto mismo recomiendan desde CNET, sitio web especializado en tecnología y en ciencia. En concreto, aseguran, es importante "tomar un descansos de cinco minutos cada media hora o un descanso de diez minutos cada hora". Además, podemos ayudarnos de la regla 60/60 para protegerns de un modo verdaderamente efectivo: "escuchar al 60% del volumen máximo del dispositivo durante 60 minutos y luego tomar un descanso". Nuestros oídos necesitan recuperarse de la presión de las ondas sonoras.

Por último, explican en este mismo portal, debemos tener en cuenta el tipo de auriculares que empleamos a la hora de escuchar música u otros contenidos. Es preferible utilizar auriculares que se colocan en las orejas de manera externa que auriculares que son colocados invadiendo el túnel del oído. Porque, aunque parezca que la diferencia de "la distancia entre el sonido y el tímpano pueda ser mínima entre unos auriculares y los otros, puede ser crucial a largo plazo". Además, aconsejan elegir auriculares con cancelación de ruido para no andar subiendo el volumen simplemente para poder escuchar el contenido. Todo suma.