Xavi y Vicente Moreno, gran derbi en los banquillos

El parón con motivo de los partidos de selecciones ha permitido dar un tiempo suficiente para que Xavi Hernández haya podido trabajar y trasladar a los futbolistas los conceptos más esenciales. La llegada del técnico ha generado ilusión y, sobre todo, expectación entre la afición barcelonista. Una vez asimilada la marcha del equipo, el duelo ha pasado y la gente solo espera a que empiece a rodar de nuevo el balón. Estoy convencido, personalmente, de que el Barça mejorará respecto a los últimos partidos, pero hay que darle margen de tiempo y confianza a Xavi para que, poco a poco, se vaya asentando su idea.

Una idea que, ahora sí, está basada en el convencimiento. Quizá no es el mejor momento, a mitad de temporada y con una plantilla no del todo compensada, pero la sensación es que con Xavi empieza un proyecto.  Arranca ni más ni menos que con un derbi y será sugerente su primer dibujo táctico, si repetirá el sistema que utilizó en Catar con tres defensas atrás, un cuadrado en el centro del campo, dos extremos abiertos y un delantero de referencia. Precisamente, donde estará más condicionado el técnico es arriba, por las bajas de Ansu y Dembélé, pero seguro que lo que veamos el sábado no se alejará de lo que tenga pensado el técnico.

Enfrente, el Barça se encontrará a un auténtico equipo de autor. Pocos tan reconocibles al carácter y la labor de su entrenador como el Espanyol de Vicente Moreno. En la Liga está también el Atlético del ‘Cholo’ Simeone, el Rayo de Andoni Iraola o la Real Sociedad de Imanol Alguacil, fieles reflejos de un trabajo bien hecho. El de Moreno vale mucho. Subió al Mallorca de Segunda B a Primera y al Espanyol lo ascendió la temporada pasada de Segunda División y este año sigue al alza. El conjunto blanquiazul compite muy bien, no es fácil ganarlo, se deja la piel en el campo y las nociones futbolísticas están muy adquiridas, hasta el punto de que su goleador, Raúl de Tomás, es titular en la selección española, algo que hacía mucho tiempo que no veíamos.

Este trabajo del entrenador viene reforzado por el acierto en la dirección deportiva y por una muy buena tarea en el fútbol base, como siempre ha pasado sacando muchos jugadores para el primer equipo. Económicamente, todo son elogios a la gestión del propietario, así que se trata de un proyecto con cara y ojos. Después de muchos años de derbis descafeinados, sobre todo en el Camp Nou, y la ausencia de la pasada temporada, hay muchas ganas de derbi, con ambos equipos empatados a 17 puntos y dos grandes técnicos que inculcan sus ideas a los futbolistas. Será interesante.