El vestuario necesita volver a vibrar

El vestuario no vibra

El vestuario no vibra / JAVI FERRÁNDIZ

Bojan Krkic

Bojan Krkic

El Barça, por filosofía, debería apostar por el sistema 4-3-3, y no solo el primer equipo. No pasa nada si, en momentos puntuales o situaciones de partidos, cambias el dibujo, pero el sistema que nos ha hecho grandes debe ser el punto de partida siempre, también a la hora de planificar la plantilla. No es lo mismo ir a buscar jugadores si vas a usarlos en uno u otro esquema y, hasta la fecha, los fichajes o ascensos desde la cantera se han realizado pensando en un 4-3-3 con un centro del campo que tenga llegada. Eso no significa que deban aportar veinte goles por temporada, pero sí la capacidad de generarlos.

Dicho esto, el sistema elegido por Koeman no es el problema ni la causa de estar perdiendo tantos partidos. Como tampoco lo es la falta de actitud. Es mucho más intangible que todo eso y ni siquiera es fácil de explicar. Cuando juegas al fútbol, no solo juega tu cuerpo y tu mente, sino que también lo hace esa parte innata de ti que, cuanto mejor eres, más importancia tiene. Pongo un ejemplo: si preguntas a Messi cómo ha marcado sus más de 700 goles, seguramente no sabrá responderte porque este tipo de futbolistas hacen cosas sin pensar, les salen de forma natural. A eso se le llama talento, pero, para ejecutarlo, necesitas estar física y mentalmente a tope y, sobre todo, vibrar con lo que haces. Leo está físicamente en el campo, pero mentalmente, por lo que sea, no está al cien por cien y eso provoca que su fútbol no fluya del todo, que juegue gracias a su fuerza de voluntad, pero no despliegue esa parte innata. Es tan bueno que sigue siendo el mejor, pero no a su nivel natural.

Lo peor de todo es que lo que le pasa a él también lo está sufriendo el vestuario, cuya coraza está hecha de dudas, incertidumbre e inseguridad. Todo está tan condicionado que nada sale de forma espontánea. Los jugadores del Barça no son hoy almas libres. Eso explica la irregularidad que está llevando al equipo a ganar 0-2 en Turín y caer 0-3 en el Camp Nou. La clave está en recuperar la vibración que les permita ser ellos mismos y, para ello, necesitan un punto de inflexión que no llegará sin un club fuerte y ordenado que refuerce esa coraza que rodea a la primera plantilla blaugrana. El equipo ha sufrido mucho últimamente y sigue sufriendo aún, cuando lo que necesita es disfrutar, que entre luz en el vestuario, aire fresco. Davids o Ronaldinho fueron, en su día, esa pieza que lo iluminó todo. Hay que encontrar una similar. Urgentemente.

COMO SOCIO, SOLO PIDO UNA CAMPAÑA LIMPIA

Queda algo más de un mes para las elecciones a la presidencia del Barça y la precampaña ya está en marcha. Todos los que quieren ser candidatos ya están, poco a poco, exponiendo sus proyectos para lograr las firmas y acudir a las urnas. Estoy convencido de que todos quieren lo mejor para el club y, en esencia, de eso se trata. Hay que recuperar la normalidad institucional para solucionar los problemas económicos y recuperar nuestra fortaleza a nivel deportivo. Como culé, lo único que les pido es que, por favor, tanto la precampaña ahora como la campaña cuando arranque sean limpias y se lleven a cabo con el respeto que todos los que quieren acceder a la presidencia deben tener por el resto de contrincantes electorales. Su obligación es proteger el club en un momento complicado y hacerlo pasa por una actitud constructiva. No es el momento de peleas que no llevan a ningún lado, sino de remar todos en la misma dirección porque, más allá de quien gane, el Barça necesita actitudes positivas.