La valentía de Rubiales derrota a Florentino

Julen Lopetegui no habló antes de dejar la selección

Julen Lopetegui no habló antes de dejar la selección / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

En una jornada de vértigo, que será recordada durante muchos años, Luis Rubiales cesó a Julen Lopetegui y nombró a Fernando Hierro como nuevo seleccionador español. La agresión del Real Madrid a La Roja, con un comunicado que ayer supimos que se lanzó a lo bruto, con nocturnidad y alevosía y sin margen de maniobra, fue contestada por Rubiales con el cese fulminante y merecido de Lopetegui.

Fue la primera decisión de Rubiales en el día de ayer, y fue una medida valiente y extremadamente arriesgada, que sin embargo era la primera de las últimas horas que por fin anteponía los intereses de La Roja a cualquier otra consideración. La argumentación del presidente de la Federación para justificarla fue impecable: un empleado (Lopetegui), que negocia a espaldas de la Federación que lo paga, y que no tiene ni siquiera el valor de informar al presidente de su maniobra desleal, debe ser cesado inmediatamente.

Si a esto le añadimos que el entrenador ya había quedado desacreditado para todos los jugadores, excepto los del Real Madrid, queda claro que la única salida posible es la que tomó Rubiales si no quería arruinar definitivamente las aspiraciones de España en Rusia.

Florentino decidió el día antes que entraba a por Lopetegui como un elefante en una cacharrería y con la soberbia del que se cree el amo del mundo, también de La Roja.

Rubiales fue consciente entonces de que se jugaba en realidad su poder en los próximos años: si bajaba la cabeza y hacía ver que aquí no pasaba nada, pasaba a ser un títere de Florentino y de quienes le aplauden. Pero demostró personalidad y coraje, tomó la resolución más difícil que ha debido acometer jamás ningún presidente, que acompañó además con la segunda decisión del día y su segundo acierto: el nombramiento de Fernando Hierro como seleccionador. A rey muerto, rey puesto.

En la rueda de prensa de la tarde, Hierro mostró su carácter y respondió a todas las preguntas con firmeza, ambición, sinceridad e ilusión, que eran justo los ingredientes que necesitaba la selección para salir del pozo. En pocas horas, Rubiales había logrado revertir la situación y la normalidad que se vivió en el entreno que se celebró a continuación hace presagiar que el misil enviado por Florentino puede convertirse, si todo se maneja correctamente, en un revulsivo que catapulte este equipo hacia lo más alto.

Para intentar evitar que el Real Madrid y su presidente queden definitivamente tocados, hay quien ayer quería hacer pasar a Rubiales por el malo de la película, y se nos intentaba hacer creer que ha sido el presidente de la RFEF el que ha desestabilizado la selección.

Pero a estas alturas del partido es difícil que prosperen ciertas milongas. Porque la verdad es que los únicos que han desestabilizado la Roja han sido Florentino y Lopetegui, un técnico que se marcha por la puerta de atrás, derrotado, desacreditado y sin excusas, puesto que él mismo ha sido cómplice de su propia desgracia. 

PRestigio tocado Cierto, Lopetegui es ya el nuevo entrenador del Real Madrid y seguro que es mucho más rico que ayer. Pero su prestigio queda fatalmente tocado, puesto que costará que los jugadores le crean cuando les jure su compromiso por el club blanco.

El Madrid tiene por fin nuevo entrenador, después de que varios le dijeran que no, pero ha pagado un altísimo precio por ello. Se ha enfrentado al fútbol español y, de paso, ha conseguido dañar gravemente la imagen del entrenador que acaba de fichar, en una jugada que no habría imaginado ni el peor de sus enemigos: tras el tiro al pie de Cristiano minutos después de ganar la Champions y el tiro al pie de la dimisión de Zidane, llega el tercer tiro al pie con el fichaje enloquecido de Lopetegui, que confirma el estado de descontrol en el que curiosamente ha entrado el Real Madrid tras ganar su ya maldita decimotercera Champions.

Tras la histórica jornada de ayer, puede decirse que la valentía de Rubiales ha conseguido derrotar a Florentino. No hay muchos que puedan decir lo mismo.