Opinión

¿Vale la pena realizar un esfuerzo para retener a Dani Rodríguez?

El extremo zurdo del Juvenil A del Barça dispone de ofertas importantes que pueden provocar su marcha. El club tiene que valorar si vale la pena realizar un esfuerzo económico para retenerlo. Dani Rodríguez tiene unas cualidades técnicas que el Barça no se puede permitir dejar escapar.

Dani Rodríguez es uno de los zurdos más creativos de La Masia

Dani Rodríguez es uno de los zurdos más creativos de La Masia / FCB

La situación económica del barça obliga más que nunca a apostar y creer en La Masia. Los casos de Lamine, Fermín, Cubarsí, Héctor Fort o Marc Guiu tienen que tener continuidad. No se trata solo de ahorrarse traspasos inasumibles y contratos que no están al alcance del Barça. Se trata de recuperar la identidad futbolística y el compromiso que solo ofrecen los jugadores de casa.

Dani Rodríguez es un extremo zurdo que ha completado una Youth League excelente. En esta competición ha demostrado un nivel enorme que está llamando la atención de grandes clubs. El Barça no tiene que volverse loco por ningún jugador porque la economía así lo exige pero sí que hay que valorar que los futbolistas de gran talento y proyección no se pueden escapar.

Hay que intentar evitar casos como los de Dani Olmo, Xavi Simons o Grimaldo, futbolistas que ahora serían básicos en el primer equipo y que por diferentes circunstancias se fueron en el pasado. El dineral que el Barça se ha gastado en laterales zurdos, interiores o en extremos se podría haber evitado apostando en su momento por estos futbolistas. Dani Rodríguez es un extremo zurdo con muchísima clase, es veloz, potente y tiene regate y gol. Esta es una posición que el Barça desea reforzar. Si Dani fuera argentino o brasileño seguro que estaría en la agenda del club. Hay que sopesar si es más rentable hacer un pequeño esfuerzo por este jugador vasco captado hace cuatro años de la Real Sociedad o intentar un fichaje que seguro que será mucho más costoso. A Dani, como al resto de canteranos, hay que seducirlos con un proyecto que esté basado en la gente de casa. Además, evidentemente, el club tiene que realizar un esfuerzo económico como el que el curso pasado hizo con acierto por blindar a Lamine, Cubarsí y al resto de la generación del 2007. Lo que ahora puede parecer caro puede ser a medio plazo mucho más rentable.