El punto de inflexión que buscaba Lewandowski

El Barça buscará el domingo el primer título de la temporada en una final de la Supercopa ante el Madrid que promete grandes emociones. La semifinal contra Osasuna la solventó con buena nota, pese a que hasta que Lewandowski no abrió la lata, el equipo chocó contra el sistema defensivo navarro y, también hay que decirlo, su propia falta de puntería. Lewandowski tuvo dos muy claras y Ferran, una que no se puede fallar. Y en esas, la amenaza de un mal resultado es permanente.

En cualquier caso, el Barça fue claramente superior, sobre todo en la segunda parte. Una circunstancia no deseada, como fue la lesión de Raphinha, tuvo un efecto impulsor. Lamine Yamal puso la chispa que faltaba y dio al ataque la velocidad y vértigo que se precisa para romper la defensa contraria. Con Lamine en el campo, todo fue menos previsible, regate, uno contra uno, diagonales... La defensa pamplonica empezó a dudar. Y llegó el gol de Lewandowski, que ya tocaba y que puede ser el punto de inflexión que el polaco busca desesperadamente.

Hay una máxima universalmente aceptada en el mundo del fútbol: los goleadores van por rachas. Es decir, ayer se rompió la negativa y podría empezar la positiva. Confiemos... El Barça necesita a Lewandowski como necesita a Pedri, que reapareció media hora, la mejor del equipo. Y a Lamine Yamal, que con su gol al final rompe otra racha que tenía al equipo bloqueado, la del 1-0. Frente al Madrid se llega con buenas sensaciones.