Laporta, el rey del mambo

Laporta, en la entrevista con SPORT

Laporta, en la entrevista con SPORT / VALENTÍ ENRICH

Joan Vehils

Joan Vehils

El presidente Joan Laporta se define en la entrevista que concedió a Sport como una persona responsable, perfeccionista y valiente. Dice que la ansiedad que lleva encima le provoca problemas con la alimentación, pero que ha empezado a cuidarse, que va al gimnasio, que no cena y que toma el café sin azúcar. Suele acostarse sobre la una y media y se levanta antes de las siete, aunque reconoce que los años empiezan a pesarle. Cumplió 61 a finales de junio.

En la actualidad, se relaja viendo películas del oeste. ‘La últimas que he visto son Rio Bravo y La Diligencia’, comenta. Sobre su mesita de noche tiene el último libro de su amigo, Xavier Sala Martin, y el del escritor estadounidense, John Grisham, ‘Los Adversarios’ que narra emocionantes historias con el mundo de la ley como hilo conductor.

Reconoce también, y lo explica sin reparos, que todavía no ha encontrado una persona que tenga tanto conocimiento de todo lo que ocurre en el club. Y como se está jugando su patrimonio y el de sus compañeros de Junta Directiva, asegura que no cederá ninguna de sus responsabilidades hasta que todo esté en su sitio.

O sea, que seguirá ejerciendo de presidente, de CEO, de director general y de todo lo que sea necesario. Laporta es así. Habla de que el club tomará decisiones cuando sea oportuno para afrontar la renovación de Xavi, pero el club es él. Todas las decisiones pasan por ese pequeño despacho con una gran mesa y con viejos cuadros todavía de la época del presidente Núñez. En campaña nunca escondió que su estilo sería presidencialista y lo demuestra a diario.

Dedica las 24 horas del día al Barça, no tiene sueldo y se reafirma en que mientras él sea presidente, el club no será Sociedad Anónima. En fin, que la Liga le ha dado alas y se muestra imparable. Ríe, se lo pasa bien y, de momento, nadie le hace sombra. Mientras el equipo gane seguirá siendo el rey del mambo.