Lo de Haaland no es un simple sueño

La realidad económica del Barça es preocupante, pero no insalvable. En las próximas semanas se darán movimientos interesantes para estabilizar el asunto y permitir algunas alegrías de cara a la próxima temporada. Joan Laporta y su equipo han reiterado que no se puede llamar al alarmismo y tienen claro que el club necesita algún fichaje que revitalice la ilusión de la parroquia tras muchos años de sequía en Europa.

Laporta es gato viejo en esto del fútbol y tiene claro que el club necesita alguna incorporación estratégica que mejore el rendimiento del equipo y también ensalce la imagen de un club que ha ido perdiendo enteros en la Champions. Los resultados son importantes, pero la imagen también y es necesario dar un golpe para avisar que el gran Barça ha vuelto. Llevan meses dándole vueltas y tienen claro que Haaland puede ser el puntal de una nueva era como en su día fue Ronaldinho. Dos jugadores que nada tienen que ver, pero pueden cambiar los ciclos futbolísticos.

BIEN POSICIONADOS Al nuevo presidente no le faltan contactos en el mercado y ya tiene claro que el fichaje de Haaland no es fácil, pero tampoco imposible. Digamos que es probable. Su nombre no es un brindis al sol, ni tampoco un sueño, simplemente es una opción que se ha trabajado para que el Barça esté en la puja final en el caso de que el futbolista salga del Dortmund. El Barça necesitará agilidad para sacar a futbolistas carísimos de la plantilla y dejar espacio, pero habrá margen financiero para activarlo. Habrá que tener mucho arte para trabajar sin desestabilizar a la plantilla, pero merece la pena. Porque esta guerra de Haaland también va contra el Madrid y, de ganarla, se sumarán muchos puntos.