Opinión

Corren malos tiempos

Xavi Hernández, en Montjuïc ante la Real Sociedad

Xavi Hernández, en Montjuïc ante la Real Sociedad / JAVI FERRÁNDIZ

Corren malos tiempos para la reflexión pausada, el debate interno y el ‘seny’ que, a priori, es ADN del/la catalán/a de base. Ser fiel a uno mismo y a los principios compartidos con los coetáneos y los que no lo son parece que se complica. Parece, no. Es. Me remuevo en mí misma escuchando al barcelonismo que camina entre el socio que va a Montjuïc buscando el asiento que no encuentra porque casi nunca es el mismo, el que paga y no va –“este es un año de excedencia”, reflexionaba el compañero Ramon Besa en Catalunya Ràdio– y el que no paga, casi nunca va y casi siempre se queja o alegra en función del momento vital. La paciencia es una virtud que no adorna al fútbol y eso marca los tiempos, los presidentes y los resultados. Respecto a esto último, trasladar esta facultad al primer equipo masculino es hacer una radiografía de su juego.

Cuesta que el jugador se ponga décimas de segundo en ‘pause’. Incluso seres extraordinarios como Lamine Yamal pecan, a veces, de precipitación y ansiedad. La victoria del Barça ante la Real Sociedad es balsámica y puntual. Me gustó el ejercicio de autocrítica de Xavi, un técnico que vive sin vivir en él pero que intenta siempre dar lo mejor de sí mismo. Ver a la cúpula directiva del club como sale de los despachos tras un triunfo y una reunión de dos horas en Montjuïc, no sabemos si es signo de preocupación o no en función de quién te lo explica. Lo que está muy claro es que vive en un permanente ‘carpe diem’ y en el ‘cortoplacismo’, algo muy poco profesional pero que comparte con la afición, que se ve arrastrada a vivir el momento a la espera de un giro de timón. ¿Cuál? No hace falta que se pongan una ‘alarma’. Salta sola.

Corren malos tiempos para el compromiso, la seriedad e, insisto, el ‘seny’. No sé ustedes, pero a mí se me llevan los demonios viendo a Mbappé y a Dembelé hacer unas risas con el futuro del primero. “Se va a Arabia Saudí, como dijo Desailly”, dijo Ousmane en la gala de la Ligue 1. A Kilian le hizo mucha gracia. Imagino que no le sentó igual la broma a Florentino Pérez, que lleva seis largos años intentando hacerse con el francés, el mismo que se apunta al cachondeo con sus compañeros. Afirmo que ya es jugador del Real Madrid porque así tuvo a bien confirmarlo el presidente de la LFP, Javier Tebas, en tierras argentinas tras invitar al presidente Milei sumarse a futuros encuentros. No me digan que no es todo un esperpento. Si resucitara Valle-Inclán no daría crédito.

Corren malos tiempos para creer. Apuntalémonos en las que, lucha personal y profesional mediante, no se mueven solo por el presente y por el dinero. Sus inversiones también pasan por el legado, los principios y lo que cada una de ellas sabe que suma. El Barça Femení se enfrenta a dos finales tras ganar un título coral de Liga y varios reconocimientos individuales. Dos sábados marcan la temporada de estas jugadoras que asisten ojipláticas a cómo se han vendido las entradas de la final de Champions League, por poner un ejemplo de exención de cuidado. Como corren malos tiempos para ciertas reivindicaciones. Pero que también corra el aire y que, como sea, haya pleno en estos partidos tan trascendentes. Lástima que el mismo día que se disputa la final de Bilbao juegue el primer equipo masculino tres horas después un intrascendente partido de Liga ante el Sevilla. Con lo bonito que hubiera sido verlos animar a sus compañeras ‘in situ’. Corren malos tiempos, sí.