Opinión

Contar el Barça con un móvil no es posible

Jaume Marcet, junto a Leo Messi en una entrevista de 'Barça TV'

Jaume Marcet, junto a Leo Messi en una entrevista de 'Barça TV' / FCB

Barça TV habría cumplido 25 años en verano de 2024, pero morirá antes de llegar al cuarto de siglo. Así lo ha decidido el club, que lo anunció con una breve nota de prensa: “El FC Barcelona informa que ha comunicado a su proveedor TBSC Telefónica, la empresa que gestiona la televisión del Club, Barça TV, que no renovará el contrato de prestación de servicios, que finaliza el próximo 30 de junio de 2023”.

Estas tres líneas sirven para dejar en la calle a 94 trabajadores y más de diez colaboradores externos cuyo coste total para las arcas del club ascendía a unos cuatro millones de euros anuales. A esta cifra hay que sumar el importe que el Barça pagaba a Telefónica, cuyo beneficio acumulado desde 2015 asciende a ocho millones de euros, además del coste (entre un millón y medio y dos millones abonados al Grupo Godó) para emitir en TDT. Son cantidades, por supuesto, muy importantes que han obligado a tomar una decisión que no gusta a nadie, tampoco a quienes la han tomado.

La crisis económica del Barça es tan grave que se ha llevado por delante a Messi y, ante una situación así, cada movimiento que realice el club debe ser examinado con lupa y, tras hacerlo, las preguntas se acumulan una tras otra.

¿Es normal pagar cuatro millones de dólares por Julián Araujo, un defensa mexicano que no ha podido jugar ni un solo minuto? ¿Es normal gastarse un millón y medio en un central de 18 años que jugaba en la segunda croata? ¿Es normal hacerlo después de haber hipotecado el club vendiendo el 25% de los derechos televisivos o un 49,5% de Barça Studios? Es normal que 94 personas se queden sin trabajo porque todo lo que se ingresa va destinado al proyecto deportivo de la primera plantilla de fútbol masculino? El Barça ha exhibido valores durante años luciendo Unicef o ACNUR, pero ha acabado olvidándose de su gente. Cerrar Barça TV solo puede considerarse como un tremendo fracaso social e institucional.

Los trabajadores de Barça TV protestan por el cierre

Los trabajadores de Barça TV protestan por el cierre / TWITTER

Este canal de televisión no solo ha narrado el ascenso de futbolistas como Leo Messi, al que dio a conocer a la AFA gracias a su hemeroteca cuando la RFEF apretaba para que se vistiera de rojo, sino que ha explicado la historia del club desde dentro, de forma íntima, ejerciendo una labor de expansión barcelonista única, pero también de introspección nostálgica, como cuando una pareja, 25 años más tarde, repasa las imágenes de su boda. Todo eso ya no existirá porque, a partir del 1 de julio, se generará un vacío documental irrecuperable. Contar con un móvil la inmensidad de un club como el Barça no es posible.