El homófobo Milonov exigió multas por criticar a la selección rusa

En todos los países hay malos y sensacionalistas políticos que se encuentran más a gusto dando que hablar en los medios que trabajando en favor del país.

Y en Rusia hay un personaje llamado Vitali Milonov que pasea su extravagancia y sus opiniones totalitarias por la Duma Estatal rusa, de la que es parlamentario además de miembro del Comité de este organismo para los Asuntos Exteriores.

Milonov es famoso por sus declaraciones homofóbicas, como cuando pidió que se encarcelase o se expulsase de Rusia a los deportistas que hiciesen visible su homosexualidad durante los Juegos de Invierno de Sochi, lugar en el que España empató ante Portugal en el debut mundialista.

En octubre de 2014, se refirió a los homosexuales como los causantes de males para la humanidad como "el SIDA, el ébola y la gonorrea".

Incluso hay fuentes que aseguran que realizó declaraciones antisemitas en la Asamblea Legislativa de San Petersburgo dirigidas contra los judíos y se le ha visto con una camiseta en la que se lee 'Ortodoxia o muerte' (es un ortodoxo radical).

Pese a estas injustificables opiniones, alguna vez sus bufonadas no iban desencaminadas, como cuando propugnó que los ciclistas tuviesen que obtener un permiso para circular por la ciudad similar al que se requiere para conducir.

Como no podía ser de otra forma, este político condecorado en el pasado por Vladimir Putin ha aprovechado el Mundial de Rusia para salir a la luz pública.

Tras proclamar que el Gobierno debería haber dado un día de fiesta después de cada victoria de la selección rusa en el torneo (tres si incluimos la eliminación de España por penaltis), Milonov fue más allá.

El de San Petersburgo, de 44 años, pidió en un pleno que se instaurasen "multas importantes, de 10.000 rublos (unos 140 euros) por criticar a la selección rusa".

"Nuestros jugadores son criticados y atacados antes de salir al campo y eso les afecta y nos afecta finalmente a todos. Tenemos que combatir ese tipo de comportamientos y para eso hay que tomar medidas", dijo Milonov ante la Duma rusa.

"Esas críticas avergüenzas a todo el país y les pondremos 10.000 rublos de multa, para que no les quede dinero para cerveza ni para patatas fritas", añadió Vitali Milonov... que Dios lo guarde en su gloria, nunca mejor dicho.