Las dudas de Loeb

Sébastien Loeb regresa hoy al WRC después de su última participación en el Rally de Turquía de 2020, donde acabó en el podio con Hyundai. El piloto más laureado de la historia de los rallies, con nueve títulos, abandonó el Mundial en 2012 y desde entonces solo ha competido esporádicamente. También ahora, en su estreno al volante de Ford Puma Rally1 en Montecarlo, se trata de una vuelta pasajera, aunque el galo, que viene de brillar en el Dakar, donde finalizó segundo con BRX a la estela de Nasser Al-Attiyah, empieza a darle vueltas a la posibilidad de correr más rallies esta temporada.

Loeb voló directamente desde Arabia Saudí a Gap para poder preparar su participación en el rally del Principado. Y aunque si algo le caracteriza es su extrema facilidad para adaptarse a cualquier coche y cualquier tipo de escenario, el Puma Rally1 con las nuevas especificaciones híbridas del Mundial de rallies le pareció todo un desafío: "Hay cosas que no han cambiado tanto, pero sí hay algunas que son nuevas a las que nos enfrentaremos en este fin de semana con esta tecnología, y también en las características de las etapas. Tendremos muchas cosas que gestionar y las etapas serán largas. Esperamos no tener que utilizar a los mecánicos demasiado y no tener problemas", asegura el francés.

Loeb probó el Puma Hybrid Rally1 en la carreteras de los Alpes, pero en distintas condiciones a las que se va a encontrar en el Montecarlo, donde la meteorología siempre es un factor clave: "No he pilotado estos coches con nieve. En los test que hice no había mucha y normalmente tenemos un día más para probar, no ha sido fácil el desarrollo, y ahora necesitamos empezar y mirar hacia delante, va a ser interesante".

Aunque pueda parecer que llega desgastado físicamente tras el Dakar y su intenso pulso de dos semanas con Al Attiyah, Loeb afirma que está listo para volver a la acción: "Estoy fresco, el Dakar ha ido bien, allí duermes mucho. Tienes tiempo para descansar, no estoy demasiado cansado y me siento preparado para cambiar a algo distinto", apunta antes de iniciar su participación en el Principado.

Sobre la nueva normativa híbrida, señala que "los coches son más potente desde que me fui, ahora tienes que anticiparte dónde va a tener más potencia o menos. Debes pensar un poco más cuando conduces y adaptarte, pero, por el resto, el coche parece más poderoso, un poco más pesado, con cambio de marchas manual. Si va a ser más rápido o más lento, no lo sé, pero me siento bien con él, el equilibrio es bueno, un poco de subviraje. Estoy feliz por estar aquí".

A sus 47 años Loeb sigue dándole vueltas a su futuro: "No sé lo que haré. De momento me he comprometido para un rally, aquí en Montecarlo, pero por supuesto que hemos hablado con M-Sport de hacer más rallies este año. Es un poco complicado ajustar todo y no sé qué haré exactamente. Estaré en la Extreme E y en algunas pruebas del campeonato de Cross Country, unas 15 carreras en total, aunque aún tengo que ver cómo encajarlo", subraya. Está claro que su decisión de ampliar su programa en el WRC va a depender mucho de lo que ocurra este fin de semana.