Tras anunciar que deja Honda, Marc Márquez correrá con Ducati en el 2024

"È tutto vero", así empieza el comunicado del 'team' Gresini sobre el 'boom' del 2023. La noticia no noticia se ha producido. El equipo del excampeón del mundo Fausto Gresini, por desgracia ya desaparecido y, ahora, dirigido por su viuda Nadia Padovani, acaba de anunciar, en el circuito de Mandalika, donde este fin de semana se disputa el Gran Premio de Indonesia, el primer del triplete asiático seguido (Indonesia, Australia y Tailandia), que el catalán 

Marc Márquez, de 30 años, el auténtico rey de MotoGP en las útimas décadas, correrá, la próxima temporada, de momento solo la próxima temporada, con una de sus Ducati 'Desmosedici'''.

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Es evidente que Márquez, que dentro de dos horas participará en una de las conferencias de prensa en Indonesia, se ha mostrado sumamente satisfecho por la oportunidad que le ha brindado el equipo italiano. “Estoy entusiasmado con este nuevo desafío”, comenta el catalán en el comunicado oficial aparecido este jueves. “No fue una decisión fácil de tomar porque es un gran cambio en todos los sentidos. Pero a veces en la vida es importante salir de la zona de confort y esforzarse para seguir creciendo. En cuanto a las posibilidades de mi nueva moto, sé que tendré que adaptar mi estilo de conducción a algunas cosas y tampoco será sencillo, pero estoy seguro de que todo el equipo Gresini me ayudará en esa tarea. Tengo ya ganas de conocer a mi nuevo equipo y empezar a trabajar con ellos. Agradezco a Nadia Padovani y a todo su equipo la confianza y el respeto que me han demostrado”.

"No fue una decisión fácil, porque es un gran cambio. Pero a veces, en la vida, es importante salir de la zona de confort y esforzarse para seguir creciendo"

Marc Márquez

Padovani, viuda de Fausto Gresini, también ha mostrado su alegría por el acuerdo. “Es un momento histórico para la familia Gresini. El hecho de que Marc Márquez haya elegido correr con nosotros la próxima temporada es absolutamente fantástico y estoy muy feliz de poder anunciarlo. Ya contábamos como Àlex y, ahora, le daremos la misma bienvenida a Marc, ya que estamos seguros de que tiene todo el potencial para ser competitivo con la Ducati GP23 desde el principio. Por último, pero no menos importante, me gustaría agradecer a Fabio Di Giannantonio por su profesionalismo y le deseamos todo lo mejor para la continuación de su carrera”.

Poco después de que se anunciase que Honda y Márquez habían llegado a un acuerdo amistoso para rescindir el año de contrato que le quedaba al piloto catalán, de los cuatro que firmó en su momento, para que el piloto de Cervera (Lleia) quedase libre y pudiese correr, la próxima temporada, en el equipo y con la moto que quisiera, todo el mundo dio por hecho, tal y como se había estado rumoreando durante los últimos meses, que sería el compañero de su hermano en el 2024. Cuando en una ocasión le preguntaron a Àlex si existía esa posibilidad, el 'hermanísimo' bromeó diciendo "vosotros los periodistas tiráis muchos triples y alguno entrará, claro".

Una moto ganadora

Lo cierto es que la intervención de Àlex ha sido vital en toda esta operación. Ya se dijo que, el hecho de que el bicampeón catalán fichara por Gresini y pasase a competir con la fabulosa Ducati, con la que ha estado delante e, incluso, ganado una carrera al 'sprint' en Silverstone (Inglaterra), podía provocar que su hermano Marc empezase a plantearse la posibilidad de romper con Honda, cuya moto ya está anticuada y es escasamente competitiva, para abrazarse a una 'Desmosedici'.

No hace mucho, hasta al máximo responsable del equipo Ducati Corse, al ingeniero Gigi Dall'Igna, se le escapó, o no, el fichaje al reconocer "el orgullo de que todo un ocho veces campeón del mundo,¡ya sabemos quien es Marc!, fiche por nuestra marca para correr en el 2024". Inmediatamente, Dall'Igna trató de matizar sus declaraciones diciendo que "es lo que se dice", pero todo el mundo tuvo ya la confirmación del fichaje del año. Eso sí, el gurú de MotoGP dijo que "Marc es, por muchas cosas, un piloto difícil de manejar y, en ese sentido, existe la preocupación de que pueda romper de alguna manera el equilibrio que existe dentro de todos los equipos Ducati".

La salida de Honda y la llegada a Ducati, cuya moto el ocho veces campeón del mundo podrá probar, en Cheste (Valencia), dos días después de acabar el Mundial, el próximo 28 de noviembre, de Marc Márquez se produce, fundamentalmente, por el expreso deseo del piloto catalán de ponerse a prueba y saber si realmente sigue siendo un piloto ganador y, por tanto, puede aspirar, como es su deseo, a superar los nueve títulos mundiales que posee su máximo rival, el italiano Valentino Rossi

, que corrió dos años con Ducati (2011 y 2012) sin poder ganar una sola carrera.

El mayor de los Márquez llega a Ducati, pero lo hace en el seno del cuarto equipo en consideración de la fábrica de Borgo Panigale, que tiene su 'team' oficial, con el campeón 'Pecco' Bagnaia y Enea Bastianini; el Prima Pramac, con 

Jorge Martín

, que aspira este año a ser campeón del mundo, y Johann Zarco y el VR46 de Rossi, con Marco Bezzecchi y Luca Marini, el hermanastro del 'Doctor''.

Preparando el 2025

Nadie, nadie en el 'paddock' de MotoGP, duda de que, aunque sea con la Ducati de este año (2023), pues es evidente que difícilmente los líderes de Ducati no van a permitir que Gresini posee dos 'Desmosedici' oficial del 2024, Márquez puede presentar batalla en cada gran premio a las poderosas Ducati, a las veloces Aprilia, de Aleix Espargaró y Maverick Viñales, y a las nuevas KTM, de chasis de carbono, de Brad Binder y Jack Miller.

Es evidente que la decisión de Marc Márquez, de profundo calado e impacto en el Mundial de MotoGP de la próxima temporada, tiene como objetivo, no solo ponerse a prueba, sino recuperarse de cuatro malos años en los que, por lesiones, operaciones y la propia crisis tecnológica de Honda, no ha podido pelear por conquistar su noveno título. Márquez quiere volver a ganar para tener la posibilidad, a finales de la próxima campaña, de elegir equipo y moto para el 2025, cuando acaban los contratos de todas las estrellas de la parrilla de MotoGP.