Verstappen-Pérez: El enemigo, en casa

Checo, a solo seis puntos de Max y empatado a dos victorias con su compañero, buscará el liderato en Miami, avalado por su legión del fans

Red Bull permitirá que sus dos pilotos luchen en la pista mientras mantenga a raya a los equipos rivales o tema que se desate una 'guerra' interna

Pérez y Verstappen mantienen un ajustado pulso por el Mundial en 2023

Pérez y Verstappen mantienen un ajustado pulso por el Mundial en 2023 / Red Bull contentpool

Laura López Albiac

Laura López Albiac

El Gran Premio de Miami puede desequilibrar el pulso interno que mantienen Max Verstappen y Sergio Pérez en Red Bull y que amenaza en convertise en una 'guerra civil' en toda regla. Con dos victorias para cada uno en lo que llevamos de temporada (Checo ganó en Arabia y Bakú y Verstappen lo hizo en Bahrein y Australia), el mexicano ya no se conforma con el rol secundario en el equipo de las bebidas energéticas y este fin de semana en la primera de las tres citas del calendario 2023 en Estados Unidos, contará con una legión de fans para intentar auparse con el liderato del Mundial, que ostenta su compañero, del que ahora mismo le separan solo 6 puntos.

En Bakú, Pérez salió muy reforzado tras anotarse las dos carreras del fin de semana, la primera sprint del año y también la prueba principal del domingo, donde mantuvo a raya a Verstappen. En favor de Max cabe recordar que el toque de Russell en la salida del sábado y la mala estrategia de Red Bull en la carrera del domingo, cuando le llamó a boxes sin esperar al inminente coche de seguridad. Pero lo cierto es que Checo también ha tenido sus momentos de mala suerte este año y de hecho, considera que ahora mismo ya podría estar al frente del campeonato.

"Creo que sin todos los problemas que tuvimos en la clasificación en Melbourne, deberíamos estar liderando el Mundial. Definitivamente lo tengo todo para creer que podemos hacerlo bien. Estoy luchando por el título, pero también sé que queda un largo camino por delante, así que necesito mantener la cabeza baja y seguir trabajando para seguir ganando carreras", advierte Pérez.

Red Bull también entiende que con 19 grandes premios por delante, debe dar libertad a sus dos pilotos para que luchen en la pista y más aún teniendo en cuenta la enorme y tranquilizadora ventaja que atesoran respecto a los equipos rivales que les persiguen: Aston Martin, segundo en el campeonato de constructores, está 93 puntos y Fernando Alonso, tercero en la tabla de pilotos, tiene 27 puntos menos que Checo y 33 menos que Max.

Guerra interna

A medida que avance la temporada, llegará un momento en el que Red Bull puede decantarse por las órdenes de equipo, ya sea por que empiecen a estrecharse las duiferencias con sus directos competidores, - Aston Martin, Mercedes y Ferrari - o bien por que consideren que la batalla interna que libran Verstappen y Pérez se les empiece a ir de las manos. En el motorsport suele decirse que el primer enemigo es el compañero, lo tienes en casa. Y a lo largo de la historia este tipo de rivalidades han resultado muy difíciles de gestionar. Y no hace falta remontarse a los tiempos de Ayrton Senna y Alain Prost. Mucho más reciente fue el pulso Rosberg-Hamilton en Mercedes, tan intenso y con tanto desgaste que llevó al piloto alemán a anunciar su prematura retirada días después de ganarle el título al inglés.

En Bakú, Verstappen y Pérez llevaron su lucha al límite. Checo sabe que para ganar al actual campeón hay que asumir riesgos: "Tocamos el muro en varias ocasiones…pero era necesario porque sabía Max presiona siempre de principio a fin”, reconoció el mexicano al término de la carrera. En Miami, Peréz puede volver a demostrar su preferencia por los circuitos urbanos, aunque hace un año, en la primera visita de la F1 al trazado Hard Rock, Verstappen estuvo intratable y se llevó la victoria por delante del tandem de Ferrari, Leclerc y Sainz, mientras que Checo tuvo que conformarse con la cuarta posición.

Así las cosas, este fin de semana pueden saltar 'chispas' en el box de Red Bull: Max no está dispuesto a cederle el liderato ante ‘Checo’ y el mexicano tiene que vitar que el neerlandés eleve su ventaja en el campeonato.

Por si acaso, Pérez ya ha dejado claro que más allá de la pista, su relación con Verstappen no es tan mala como la 'pintan' en los medios: "Me llevo bien con Max. Como es lógico, los dos queremos ganar. Pero fuera del coche tenemos buena relación. Somos muy parecidos fuera de las carreras. Tenemos una vida aparte lejos de las pistas. Eso ayuda a la relación en sí".