Márquez-Rossi: el pulso llega a casa del 'Doctor'

Quedan seis carreras y 150 puntos en juego para que decidir el Mundial de MotoGP 2016. Marc Márquez (Honda) dispone de una cómoda ventaja de 50 puntos al frente de la clasificación, pero los otros dos aspirantes al título, los pilotos de Yamaha, Jorge Lorenzo y Valentino Rossi, no han dicho su última palabra. 

Este fin de semana, el campeonato llega a territorio hostil para los españoles, en especial para Márquez y Lorenzo. El año pasado Rossi les acusó de un imaginario complot para quitarle el título, provocando la ira de sus tifosi. El 'doctor' y Márquez han hecho las paces, pero está por ver el recibimiento que le dispensarán Marc los paisanos de Valentino, que nació y vive en Tavullia, a apenas 12 km del Misano World Circuit Marco Simoncelli, escenario del GP de San Marino.

Al margen de polémicas, deportivamente hablando hay que subrayar que Rossi no está tan lejos como parece de Márquez en la clasificación. En Silverstone firmó un valioso podio que le permitió recortar tres puntos a Marc, cuarto, y salir moralmente reforzado en un pulso que promete emoción hasta el final.

En Gran Bretaña Márquez y Rossi protagonizaron un duelo marcado por adelantamientos al límite en el que el de Honda se olvidó de la 'calculadora' y dejó atrás su conservadurismo de los últimos tiempos para volver a recordar al 'viejo' Marc de "por la puerta grande o en ambulancia".

Rossi que en Silverstone se convertía en el primer piloto en alcanzar la cifra de 250 Grandes Premios en la categoría reina, sabe que sus posibilidades de superar a Márquez en el Mundial son mínimas pero espera aprovechar el factor 'local' para desestabilizar a su rival. El año pasado la fórmula no funcionó, ya que fue Márquez quien ganó la partida en Misano.

Los tifosi que cada año tiñen de amarillo las gradas del circuito que lleva el nombre de Marco Simoncelli, han visto subir a Valentino Rossi a lo alto del podio en 2008, 2009 y 2014 mientras que la temporada pasada se conformaron con la quinta plaza del italiano.

"Será el fin de semana más especial de la temporada para mí, porque la de Misano es 'mi carrera', en casa. Alli solemos ir bien y esperamos ser competitivos también en esta ocasión", dice Valentino. "Habrá una gran atmósfera, muchos fans, amigos, familia, pero también mucha presión entorno a mí. Debemos intentar dar el cien por cien e incluso un 20% más", avisa.

Por su parte, el actual campeón del mundo Jorge Lorenzo confía en empezar a revertir su mala racha, después de sumar un único podio en los últimos seis grandes premios. Misano es un circuito favorable a sus intereses. Fue segundo en sus tres primeras apariciones en la categoría reina y luego encadenó tres victorias consecutivas. En 2014 volvía a terminar segundo mientras que no acabó la carrera en mojado de 2015.

Maverick Viñales llega con el buen sabor de boca que le dejó su primera victoria en MotoGP lograda hace una semana en Silverstone, la primera para Suzuki su primer triunfo desde 2008. En Misano tiene una especial presentación ante los fans de Rossi, con el que compartirá box en Yamaha en 2017.