Un inicio discreto para el Girona

Las piezas ya están. Ahora solo falta hacerlas funcionar al máximo nivel para que lleguen los resultados. Mañana hará una semana que el Girona dio la plantilla por cerrada con la posterior incorporación de Borja García, después de rescindir contrato con el Huesca. Míchel Sánchez sabe, por lo tanto, que no podrá contar con Gerard Gumbau (Elche), el encargado de lanzar las jugadas a balón parado, y que Samu Sáiz seguirá en el equipo, con la misión de hacerlo rendir al cien por cien.

Con el equipo definido, los gerundenses encajaron el pasado viernes la primera derrota en Montilivi -la segunda consecutiva- contra el Sporting (1-2). Es verdad que no estaba Arnau Martínez, con la selección sub-19, que Santi Bueno sigue recuperándose de su lesión y que Borja todavía no entró en la lista de convocados, pero son situaciones con las que seguramente se encontrarán a lo largo de la temporada.

A pesar de que las sensaciones son buenas, y la segunda parte del partido contra los de David Gallego así lo confirmaba, el Girona está haciendo un inicio de curso discreto. No empezaba la Liga con un 4 de 12 desde el estreno en Primera (2017-18). Por otra parte, el técnico sigue pendiente del alcance de la lesión de David Juncà. El de Riumors tuvo que abandonar el terreno de juego contra el Sporting por un pinchazo en el muslo izquierdo y ya se sometió a las pruebas médicas. Durante el día de hoy se conocerán los resultados.