El Girona debe remediar su sequía goleadora para lograr el sueño del ascenso

El Girona FC buscará el próximo domingo en Tenerife regresar a Primera División por la vía de la promoción de ascenso, hecho inédito hasta la fecha. Para ello, a los de Míchel no les vale otra cosa que no sea ganar. El reto es considerable, aunque el premio que espera a uno de los dos equipos bien lo merece.

Gran parte de las posibilidades del conjunto catalán pasan por recuperar la efectividad de cara a portería. En el partido de ida en Montilivi (0-0), los rojiblancos dominaron y llevaron la iniciativa durante los 90 minutos. Sin embargo, el monólogo de los locales no fue suficiente para generar demasiado peligro en área rival. Si bien es cierto que enfrente tenían -y tendrán- al equipo menos goleado de Segunda División, también lo es que los de Míchel no pasan por su mejor momento en ataque.

Contando las últimas ocho jornadas de liga regular y los tres partidos disputados de Play-Off, el Girona solo ha podido anotar en seis de los últimos once encuentros. Una tendencia que explica el bajón del equipo en el tramo final de curso y que le da aún más valor a la gesta lograda en Ipurúa, el único partido de promoción de ascenso en el que los gerundenses han visto portería.

Desde la goleada ante el Ibiza (5-1) el pasado 19 de marzo, solo tres jugadores rojiblancos han perforado las redes de la portería rival. Stuani (6), Nahuel Bustos (2) y Borja García (2), quien no estará en Tenerife debido a la lesión de rodilla que sufrió en la anterior eliminatoria.

Pese a la notable contribución goleadora de la parcela defensiva, el Girona necesita que jugadores de otras demarcaciones también vean portería. Futbolistas de segunda línea como Baena, Iván Martín y Samu Sáiz e incluso Valery o Aleix García deben dar un paso al frente en el aspecto anotador. El domingo sería el mejor día posible para demostrarlo.