RUSIA

Tosno y Avangard disputarán la final más insólita de la Copa de Rusia

El Avangard Kursk celebró a lo grande su histórico pase a la final

El Avangard Kursk celebró a lo grande su histórico pase a la final / FK AVANGARD

David Rubio

David Rubio

La Copa de Rusia vivirá el próximo 9 de mayo en el flamante Vologograd Arena la final menos esperada de todos los tiempos.

Se enfrentarán el Tosno (penúltimo clasificado de Primera División y recién ascendido por primera vez) y el Avangard Kursk, equipo que marcha décimo en Segunda División y que tiene el descanso a solo seis puntos.

Pero... ¿cómo es posible que estos dos equipos tan modestos se hayan plantado en la gran final?

Por cierto, que el ganador tendrá el billete con menos 'glamour' de la historia a la próxima edición de la Europa League. Además, accederá directamente a la fase de grupos sin necesidad de disputar el 'play-off' previo.

El principal motivo es que la Unión de Fútbol de Rusia ha sido más valiente que la Federación Española y mantiene la Copa a partido único, lo que permite a los clubs modestos multiplicar sus opciones.

Además, tampoco hay cabezas de serie, por lo que puede darse un Zenit-CSKA o un Spartak-Lokomotiv en la primera ronda en la que se incluyen los equipos que disputan competiciones europeas.

el avangard eliminó al CSKA en octavos

La trayectoria del Avangard, un modesto club del sur de Rusia ubicado en la ciudad de Kursk (450.000 habitantes, muy cerca de la frontera con Ucrania) es impresionante.

Hasta la fecha, su aventura más larga en el torneo del KO data de 1963 (Copa de la URSS), en la que llegó hasta dieciseisavos de final (cayó por 8-0 ante el Torpedo con su antiguo nombre de Trudovie Rezervi.

El equipo que dirige Khasanbi Bidzhiyev (un exjugador del Lokomotiv y del Hapoel israelí) debutó en la actual Copa de Rusa eliminando en la primera ronda al Dinamo Briansk a domicilio (0-1) y dio la campanada en dieciseisavos noqueando en la prórroga a un CSKA Moscú plagado de suplentes (1-0).

En octavos, el Avangard venció al Tambov a domicilio (0-2) y en cuartos pudo con el Amkar (13º clasificado en Primera) en los penaltis (7-6) tras acabar sin goles el tiempo reglamentario y la prórroga.

En un duelo entre equipos de Segunda, el Avangard derrotó este miércoles en su estadio al Shinnik Yaroslav en la semifinal menos mediática de la historia gracias al solitario tanto en el 79' (1-0) de Igor Kireev, un jugador de 26 años formado en el Spartak.

la gran campanada del tosno

Su rival en la final del 9-M será el Tosno, que protagonizó la gran sorpresa de la competición eliminando en su feudo al Spartak Moscú en los penaltis, un resultado que está haciendo tambalearse el italiano Massimo Carrera, el técnico que rompió 13 años de sequía para la 'carne' (nombre que recibe el club para los rusos) ganando la Liga.

Con casi todos los titulares en liza, el Spartak se adelantó con un tanto del internacional caboverdiano Ze Luis en el 62', pero cuando el estadio ya celebraba el pase a la final y poco menos que la consecución del título a la vista de su rival, llegó el mazazo.

El internacional uzbeko y ex del Rubin, Vagiz Galiullin, empató en el minuto 89 y llevó al partido a una prórroga en la que no hubo goles.

Y eso que el capitán de la 'carne', el internacional ruso Denis Glushakov, tuvo en sus botas el tanto de la victoria en el minuto 120 cuando encaró al turcomano David Yurchenko y disparó más que desviado.

Penaltis. Y ahí volvió a ser Glushakov el eje de las críticas, ya que tras la primera serie de cinco penaltis (4-4) lanzó el sexto a las manos de Yurchenko y posibilitó la clasificación del Tosno gracias al lanzamiento decisivo que transformó otro internacional caboverdiano, Nunu Rocha (4-5).

Antes, el Tosno, equipo de San Petersburgo que disputa sus partidos en el vetusto Petrovski en el que apenas caben 6.000 espectadores, había eliminado al Tiumen en dieciseisavos (2-1), al Tom Tomsk en octavos (0-0 y 6-5 por penaltis) y al Luch Energia Vladivostok en cuartos (2-1).

Por tanto, Avangard y Tosno disputarán el 9 de mayo una histórica final de la Copa de Rusia que servirá para inaugurar otro estadio del Mundial de Rusia, el Volgograd Arena, con capacidad para unos 45.000 espectadores.