"Tiraron a mi esposa al suelo y me pusieron una pistola en la cabeza durante 10 minutos"

El pasado fin de semana las víctimas fueron los futbolistas del PSG. Intentaron robar en las casas de Di María y el padre de Marquinhos. Sin embargo, ni es la primera vez ni será la última. De hecho, al argentino ya le robaron hace seis años. Corría el año 2015, y el jugador militaba en el Manchester United. Tras los ataques yihadistas, y el ambiente que había en el país, el equipo francés ya fortaleció la seguridad en los domicilios de sus jugadores. Unos ataques que no solamente dañaban físicamente o económicamente a los deportistas, si no que han dejado secuelas psicológicas en las familias.

El robo en la casa de Ángel Di María fue pacífico. De hecho, su esposa e hijos, que sí estaban allí, no les escucharon. El futbolista estaba disputando el partido de liga contra el Nantes. La cantidad de relojes y joyas no superó los 500.000 euros. No obstante, en la casa de Marquinhos sí se trató de un asalto violento, según analizaban desde la AFP. Aunque todavía desconocen la cantidad total.

Precisamente de ello ha hablado Florent Balmont en Le Parisien. "Estaba durmiendo en casa y jugaba al día siguiente. Eran las 5 de la mañana y tres personas abrieron la puerta y me dijeron que habían venido a buscar las llaves de mi coche, que estaba en la parte de delante. Tiraron a mi esposa al suelo y me pusieron una pistola en la cabeza durante 10 minutos. Mi hija tenía cuatro años. No salió del dormitorio de arriba, pero lo vio todo”, explicaba.

Mientras a ellos dos no les causó un gran trauma “superarlo solos”, sí lo fue para su hija pequeña, “le persiguió durante años”, confesaba. “El club puso agentes desde las 8 de la tarde hasta las 6 de la mañana y durante ese período, pasamos todas las noches en la misma habitación: mi esposa, mi hija de 4 años y la menor, que por aquel entonces tenía 11 meses”, admitió.