"Casillas debería retirarse"

Iker Casillas, ingresado por un infarto

 El portero del Oporto sufre un infarto al finalizar un entrenamiento y se somete a un cateterismo / Perform

SPORT.ES

Después de ganar el partido de su vida, Iker Casillas se prepara para regresar a la vida normal. Todavía es pronto, pero más temprano que tarde saldrá del hospital y empezará su rehabilitación. Pero, una vez superado el enorme susto, la pregunta que todo el mundo se hace es si el de Móstoles podrá volver a jugar.

Entre los cardiólogos hay diversidad de opiniones, desde los que creen que con el tiempo puede volver a enfundarse los guantes hasta los que opinan que, a pocos días de cumplir 38 años, se le ha acabado la carrera deportiva. Casillas, que recientemente renovó por una campaña con el Oporto y que en más de una ocasión había dicho que le gustaría poner punto y final a su trayectoria como profesional a los 40 años, ha visto cambiar sus planes de manera radical de la noche a la mañana.

EL STENT, FACTOR CLAVE

Una vez Iker Casillas acude al centro médico, los galenos encontraron una lesión en la arteria coronaria derecha y, por medio de un cateterismo, la resolvieron con la colocación de un stent para ensanchar la arteria obstruida.

El stent, tubo que sirve para mantener abierto un vaso o arteria, es el principal problema que ve Juan Antonio Corbalán, exjugador de baloncesto y cardiólogo. “No se puede jugar al fútbol con un stent coronario y mucho menos un portero. Iker acabará haciendo una vida normal pero no jugará al deporte profesional”, declaró a TVE. Fuentes del Oporto tampoco ven nada claro que el portero pueda volver a jugar.

Más optimista se mostró el doctor José González, que señaló en el diario 'AS' que Casillas podría volver a los terrenos de juego. “Hay que esperar la evolución de las lesiones y que en todas las pruebas médicas rigurosas que se le realicen en el futuro, la función cardíaca vuelva a la completa normalidad. Casillas puede tener la posibilidad de volver a disfrutar de su profesión”.

También positivo fue el cardiólogo José Calabuig en ‘El Larguero’ de la Cadena SER. “Físicamente si esa arteria no ha dejado huella en el músculo hay que pensar a que se consolide. Dentro de tres o seis meses se valorará como está la situación. Si todo ha ido bien, perfectamente se podría reincorporar al trabajo”.

En la misma línea se expresó el doctor Vasco Gama Ribeiro en ‘El País’: “El tratamiento consiste en retirar el trombo y restablecer el riego sanguíneo lo más rápido posible. Todo depende del tamaño del músculo afectado y el tiempo en que la circulación sanguínea estuvo parada. Si fue tratado con rapidez no queda lesión alguna en el corazón. El límite son los 90 minutos”.

LA FORTUNA, DE SU LADO

En el momento más crucial, la suerte no dejó de lado a Iker Casillas. A lo largo de su carrera ha sido un factor clave en determinados encuentros y jugadas, y ahora lo ha sido para salvar la vida.

Iker tuvo toda la suerte del mundo de que esto sucedió en el entrenamiento, con los médicos del Oporto presentes. Si hubiera ocurrido en casa, las consecuencias habrían sido imprevisibles”, declaró el representante del arquero, Carlo Cutropia, en ‘El Partidazo de COPE’.

“Esto es más importante que ganar un Mundial. Iker ha hecho la defensa más importante de su vida”, añadió el agente del jugador, que explicó cómo ocurrió.

“A mitad del entrenamiento empezó a sentirse mal, a dolerle el pecho, la boca y los brazos; no tenía noción de que estaba teniendo un infarto, se lo dijeron después. Nunca había tenido ningún síntoma y no se quedará con secuelas”, destacó Cutropia que, como todos, respira aliviado.