El fútbol catalán se vuelca con Sant Jordi

Las entidades celebraron la tradicional festividad con rosas, libros y mucho fútbol

Gran afluencia en la parada del Nàstic de Tarragona en la Rambla Nova de la ciudad

Ambiente de Sant Jordi en Tarragona

Ambiente de Sant Jordi en Tarragona / Nàstic de Tarragona

SPORT.es

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Catalunya vivió en la jornada del martes uno de los días más especiales del año, Sant Jordi. Un día marcado por las rosas, los libros y donde las entidades del fútbol territorial también estuvieron muy presentes.

Qué mejor regalo para los clubes que alcanzar sus objetivos de la temporada, bien sea el ascenso o bien la permanencia en cualquiera de las categorías.

La parada instalada por el Nàstic en la Rambla Nova de Tarragona incluyó firma de autógrafos por parte de los jugadores Óscar Sanz y Nacho González, del primer equipo, así como Ane y Helene del femenino.

Además, el Nàstic puso a la venta rosas solidarias al precio de tres euros para ayudar al equipo de Powerchair Football de la entidad.

El Sabadell instaló su parada en la puerta cero de tribuna de la Nova Creu Alta, con ofertas en libros sobre fútbol, mientras el Sant Andreu vendió su ‘rosa quadribarrada’, con la compra de la cual se sorteaban dos camisetas del club.

Gran afluencia de seguidores en el campo de la calle Virgili, también para adquirir localidades para el partido ante el Mestalla. 

En el Europa, la jornada festiva se vio ensombrecida por el fallecimiento de Leonor Munté Munté, socia número 102 de la entidad. Por su parte, el Cerdanyola instaló una carpa en la Plaça de l’Abat Oliba de la localidad vallesana, donde se vendieron gran cantidad de rosas con el logo del club.

El Terrassa, mientras tanto, instaló su parada en la Plaça Vella de la ciudad, en colaboración con Omnia Books, vendiendo gran cantidad de ejemplares de la ‘Rosa Terrassista’. 

En el Lleida Esportiu, la festividad llegó acompañada de una campaña de descuentos y regalos para llenar el Camp d’Esports el domingo ante el Europa. Todos los clubes del fútbol catalán, de una manera o de otra, estuvieron presentes en una jornada muy especial donde los libros y las rosas convivieron también con el balón.