Un toro llamado André Onana

“Me cago en el puto negro este, ¡ha vuelto mejor que cuando se fue!”, explica André Onana que fue la reacción de sus compañeros del Ajax de Amsterdam después de que el guardameta regresase a su equipo, tras cumplir la sanción de nueve meses que le apartó de los terrenos de juego por supuesto dopaje.

Lejos de hundirse, Onana sacó fuerzas de donde otros no las habrían encontrado. El camerunés fue sancionado por dar positivo en el control antidopaje de la UEFA, al confundir una aspirina para el dolor de cabeza con un medicamento para combatir la retención de líquidos que tomaba su mujer, que acababa de dar a luz. "André, has dado positivo en furosemida, un diurético para la retención de líquidos en embarazadas", le dijeron el 30 de octubre. "¿Tengo cara de embarazada?", respondió André entre risas al no dar crédito con la situación.

La misma UEFA reconoció que se trataba de un error involuntario y rebajó la sanción de dos años a uno. El guardameta fue al TAS, donde le dieron la razón al ser una sanción desproporcionada, y se rebajó a nueve meses.

Onana estuvo apartado del fútbol, pero se puso en manos del preparador de porteros Yvan Castillo para mantenerse en forma y no perder el ritmo de competición. La condición que le impuso Castillo fue la de llevar a cabo este 'intensivo' en España y la localización escogida fue el Complex Esportiu Futbol Salou. Se rodeó de hasta siete profesionales un nutricionista, un psicólogo, un fisioterapeuta...

Una experiencia de vida

"El objetivo es que llegara como un toro", comenta Yvan Castillo. Dicho y hecho. A Onana se le generó un contexto de entrenamiento global, como si estuviera en un equipo. Por ello, era recurrente ver a invitados en estos entrenamientos, como el Mejor Jugador de Fútbol Playa del mundo de 2018, Llorenç Gómez. De lunes a sábado, con dos días de doble sesión. El guardameta estaba tres semanas en Salou y durante la otra semana del mes, seguía con el plan pero en la parte del mundo que desease.

"Cuando nos reuníamos, siempre volvía con las pilas cargadas y con ganas de más", explica Castillo, quien destaca que "desde el primer día hubo un 'feeling' especial entre ambos, ha sido una auténtica experiencia de vida". Además de su humildad, de estar siempre con una sonrisa y de estar siempre predispuesto a mejorar, su entrenador durante estos siete meses en Salou destaca por encima del resto "su fortaleza mental".

El 13 de noviembre volvió a enfundarse los guantes para defender la portería de Camerún ante Malawi y, tres días después, Costa de Marfil. Ambos con la portería a cero y con su selección clasificada para la última ronda de acceso al Mundial de Catar 2022.

"Cuando volví al Ajax, todo el mundo quería ver si había engordado Me vieron muy bien física y mentalmente, porque cuando te pasa algo así, es muy fácil dejarte ir", explica Onana. Su reestreno con el Ajax fue el pasado día 24, frente al Besiktas en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions. Onana encajó gol, pero fue desde los once metros. Ahora se abre una nueva ventana, ya que ha tomado la decisión de poner punto y final a su etapa en Amsterdam, donde está desde 2015.