¿Qué tienen en común los segundos entrenadores del Barcelona, Barça B y juvenil A?

Suele decirse que los porteros son los que mejor entienden el juego colectivo del equipo, pues su posición en el césped es privilegiada. Algunos, cuando se retiran prosiguen ligados al mundo del fútbol desde los banquillos, y ahí está el ejemplo de Julen Lopetegui con la selección española. En el Barcelona, son igual de imprescindibles, pero están más a la sombra, lejos de los focos. Tienen un ‘laboratorio’ en la cabeza, se encargan de las acciones de estrategia... y dan muchos puntos.

Ellos son Juan Carlos Unzué, Felip Ortiz y Albert Jorquera, segundos entrenadores del primer equipo azulgrana, el filial y el juvenil ‘A’, respectivamente.  Hombres de confianza de Luis Enrique, Gerard López y Gabri García, no se antoja como casualidad que los tres se encarguen de la ‘pizarra’ y procedan de la misma demarcación, la portería.

El trabajo de Juan Carlos Unzué es el más reconocido, pues lleva con ‘Lucho’ desde que el asturiano lo pidió para el Celta. Antes, se había desempeñado como entrenador de porteros con Frank Rijkaard e incluso como primer técnico, concretamente en el Numancia.

El pamplonés es metódico, muy inteligente y pone el contrapunto a la visión más pasional de Luis Enrique. La plácida clasificación para los octavos de la Champions se empezó a gestar con un triunfo en Mönchengladbach en el que la ‘pizarra’ de Unzué salió a relucir con un gol de Piqué, uno de los que más provecho saca de las jugadas diseñadas por el técnico.

Cuando Gerard López se hizo cargo del Barça B en julio de 2015, lo primero que reclamó fue contar en su cuerpo técnico, junto a García Pimienta, con Felip Ortiz, con el que había jugado en el propio filial. Felip dejó de ser el entrenador de porteros del Nàstic y pasó a diseñar la estrategia, con buen resultado, como por ejemplo, en Palamós ante el Llagostera: falta lateral de Perea, peina Romera y Carbonell fusila...

Y en el juvenil A, un calco. Jorquera pasó de entrenar a los porteros del Llagostera a ser el segundo de Gabri hace dos temporadas. Un tándem que tiene al equipo líder en División de Honor y en octavos de la Youth League. 

El Barça puede estar tranquilo, la estrategia está bien protegida.