El mejor Cancelo, de la mano de Xavi

Joao Cancelo ha aterrizado en el Barça con 29 años y dejando atrás una dilatada trayectoria profesional que arrancó en el Benfica y que siguió en el Valencia, Inter, Juventus, Manchester City y Bayern, al que llegó cedido a mitad de la pasada temporada. Su deseo, como explicó en su presentación, era jugar en el Barça y, aunque sigue siendo propiedad del City, le han bastado cuatro partidos para, por un lado, demostrar que su sueño no era un capricho y, por el otro, darle la razón a Xavi, la persona que más insistió en lograr su incorporación.

El Barça se resiste a bajar de la nube

Es habitual e incluso recomendable que haya discrepancias a la hora de ir a por uno u otro jugador para reforzar una posición concreta. Pasa en todos los clubs y el Barça no es una excepción. Cuando llegó el momento de ir a por un lateral derecho, Deco creyó que la mejor opción era la de Iván Fresneda, unas de las revelaciones la pasada temporada con el Valladolid. Tanto fue así que el jugador, de solo 18 años, acabó firmando por el Sporting de Portugal, que pagó nueve millones de euros a los pucelanos por él. Xavi, en cambio, creía más en la experiencia de Cancelo. Ambos acabaron consensuando la decisión y el director del Área de Fútbol se puso manos a la obra para lograr la cesión del portugués, en la que su agente, Jorge Mendes, también ha jugado un papel muy importante.

Los números, pero sobre todo las sensaciones, son de futbolista de los grandes. Cancelo y el Barça han encajado como un guante hasta el punto de que, en estos cuatro partidos, ya ha sido capaz, con dos goles, de superar sus registros goleadores en el Bayern, la Juventus y el Inter, donde solo fue capaz de anotar un tanto. En el Valencia su rendimiento había sido mejor: jugó 91 partidos, en los que marcó cuatro goles y dio ocho asistencias. Y en el Manchester City, Pep Guardiola también supo extraer las mejores esencias del jugador gracias a un sistema que le permitía ser protagonista, todo lo contrario que en sus aventuras en Italia o en Alemania, incluso con Nagelsmann o más tarde con Tuchel. Eso sí, la relación no acabó bien entre el técnico catalán y el futbolista.

Libertad absoluta para Cancelo

Con Xavi, Cancelo tiene libertad total para atacar, para irse por dentro, para penetrar en el área, para abrirse a la banda. Su despliegue físico, que ha sorprendido a más de uno en el vestuario, le permite jugar noventa minutos a un ritmo enorme. La mejor prueba de ello son los dos goles que suma hasta la fecha. El primero llegó en el 5-0, cuando el luso marcó el quinto en el minuto 81 con un despliegue de potencia, técnica y calidad. Repitió ante el Celta, esta vez en el minuto 89, al que llegó fresco para entrar en el área y aprovechar la cesión de Gavi para culminar la remontada. Antes, en el 85’, ya había asistido a Lewandowski.

Cancelo interviene, de forma directa, en un gol cada 95 minutos desde que está en el Barça, una media al alcance de muy pocos defensores en el mundo. Falta por ver si estos números tendrán continuidad, pero es evidente que Xavi cuenta con un futbolista determinante y diferencial en una posición coja desde hacía demasiados años.