Luis Enrique: "Da igual quién nos toque en 'semis'; y me alegro por Guardiola"

El entrenador barcelonista no tiene preferencias por el rival que le toque ahora su equipo en esta fase de la competición. Ya sea el Madrid, el Atlético -que juegan este miércoles-... o el propio Bayern: "Me da igual, porque no tengo voz ni voto en eso. Estoy contento por Pep y el resultado que ha tenido. Ya veremos si nos cruzamos o no", comentó en declaraciones a TV3. "Le dieron por liquidado y su equipo ha marcado 6 goles teniendo muchas bajas. Pep ha demostrado lo gran entrenador que es", agregó después.

Luis Enrique se mostró orgulloso de que el Barça haya llegado a 8 semifinales de Champions en los últimos diez años. Algo que, a su juicio, "habla del peso de este club en Europa, es un dato para estar orgulloso". Una cifra casi tan espectacular como el 84% de victorias logradas por el Barça esta temporada. Aunque a esto el técnico culé no le da trascendencia, pues "hay que corroborarlo con títulos".

Ya en rueda de prensa, el técnico azulgrana destacó la concentración de sus discípulos ante el PSG, porque no se confiaron pese a la cómoda renta de 1-3 lograda de la ida: "Los jugadores interpretaron bien lo que necesitábamos. Viendo la presión que hicieron en los primeros minutos lo demostraron. Los partidos siempre pueden complicarse aunque parezcan plácidos", advirtió.

Luis Enrique elogió a sus futbolistas por este y por otros muchos motivos: "Defender en campo contrario significa muchas opciones de recuperar el balón y generar ocasiones. Para eso se necesita la solidaridad de todos los jugadores, la ayuda de todos, defender como bloque y eso se ve cada semana. Tenemos un potencial ofensivo muy grande, y con alta capacidad de defender", valoró.

Luis Enrique ve al Barça en la buena línea, aunque no se atreve a vaticinar si lo mejor, con aspiraciones en los tres títulos, está por llegar: "No me atrevería a decir algo así, pero sí que es un deseo. Ojalá lo mejor esté por llegar. La Liga aún está difícil, en la Champions llegarán tres rivales difíciles... Estamos donde queríamos estar, pero hay que refrendarlo todo", insistió.

El técnico razonó de esta forma la mejoría de juego experimentada por el Barça en contraste con la sufrida victoria del pasado sábado ante el Valencia: "Los jugadores no son máquinas y no están igual de bien todos los días. La presión del Valencia fue muy alta, esa es la grandeza del fútbol. Hoy contra el PSG corríamos ese riesgo también".

El asturiano, asimismo, admitió que cambió a Iniesta en el descanso para evitar correr riesgos tras su lesión de espalda -"toda precaución es poca"-, e insistió en que, tras llegar a 'semis' de la Champions, "el objetivo ahora es estar entre los dos mejores de Europa".